Verónica Forqué trae al Teatro Quintero "Shirley Valentine"

Hablar de Verónica Forqué es hablar de una actriz con mayúsculas, de raza, que conoce bien el oficio desde dentro, no en vano es hija del gran director José María Forqué. Rostro habitual del cine y la televisión, no deja nunca de lado el teatro y, si ya vino a Sevilla, en 2003, con El sueño de una noche de verano de William Shakespeare o con La abeja reina, de Charlotte Jones, en 2009, el público sevillano podrá disfrutar de su presencia sobre las tablas del Teatro Quintero con Shirley Valentine un monólogo escrito por Willy Russell. La actriz estará en Sevilla del 6 al 8 de octubre con una obra, de 1986, que obtuvo un gran éxito cuando se representó en Londres. La adaptación corre a cargo de Nacho Artime y la dirección la asume Manuel Iborra, pareja sentimental de la actriz.

Verónica Forqué junto al cartel de la obra Shirley Valentine

Durante la presentación la actriz estuvo acompañada por Jesús Quintero, quien destacó que "la obra trata de una ama de casa que está cansada de serlo". Quintero también señaló que "la obra no ha perdido un ápice de frescura y ha triunfado allá donde se ha representado". Sobre la experiencia con este texto Forqué afirmó que "es una comedia y hemos visto que el público se ha reído mucho con ella, por lo que, gracias a ello, suspiré y me relajé. El público es mi compañero en realidad". Forqué señaló que este monólogo "exige un esfuerzo de concentración y de entrega, para que no se pierda el hilo de la historia". La actriz indicó que la pieza "gusta mucho a las mujeres pero también a los hombres".

Preguntada acerca del panorama televisivo actual, medio en el que fue vista recientemente en la serie Hospital Central, Forqué explicó que "en esa serie me ofrecieron un personaje episódico, una mujer que sufre Alzheimer y me gustó el personaje. Siempre hago las cosas que me gustan, ya que mi padre me aconsejaba que hay que saber decir que no, no hay que decir sí a todo pero cuando me ofrezcan algo bonito en televisión, lo haré".

Después de la rueda de prensa, Verónica Forqué tuvo la amabilidad de contestar a unas preguntas para este blog.

Pregunta: ¿Qué es lo que le lleva a escoger una obra de teatro determinada para representarla?

Verónica Forqué: Es algo muy intuitivo y muy profundo. Primero la leo, la vuelvo a leer, pero con una primera lectura yo ya sé si me veo en ese personaje, si voy a ser capaz de hacerlo bien y disfrutarlo mucho, porque el teatro es un compromiso muy grande, como mínimo es un año y medio de trabajo. Te tiene que llenar mucho, para no engañar a la gente ni a ti, ni aburrirte.

Pregunta: El hecho de pertenecer a una familia de artistas (su padre la dirigió en la serie Ramón y Cajal) ¿le ha hecho ver la profesión desde una perspectiva distinta? 

V.F.: Yo creo que sí. Yo he visto desde pequeña, por casa a muchos actores y actrices, en su mejor momento, en sus momentos malos, cuando no los llamaban para trabajar, cuando volvían a llamarlos, sus subidas y bajadas, la inestabilidad de este oficio. Entonces siempre he sido muy realista y tanto cuando me ha ido muy bien, o regular o peor, he procurado de mantener los pies en la tierra, seguir trabajando, haciendo cosas que me guste y que me llenen y no venirte abajo nunca.

P: Trabajar con su pareja ¿le da una motivación especial?

V.F.: Cuando viene él me pongo muy nerviosa. Es un hombre muy sensible y muy exigente y sé que siempre me va a dar notas de cosas que mejorar, pero eso también está muy bien, a mí me gusta. Yo soy muy exigente conmigo y me gusta la gente que busca la perfección.

P: Hace poco estuvo en Sevilla rodando una película Alicia en el país de Ali ¿cómo ha sido la experiencia?

R: Se llamará Ali, ha sido un rodaje con un equipo de gente muy joven, entusiastas y cariñosos, me han tratado muy bien y hemos trabajado muchas horas.

Con esta respuesta acabó un encuentro con una gran actriz y entrañable persona que hace muy fácil la labor de los periodistas como un servidor, que ha comprobado de primera mano que la gente grande en su profesión, como Verónica Forqué, lo son por algo y ese algo se resume en dos palabras: profesionalidad y sencillez.

FOTO: ALEJANDRO RECHE SELAS