martes, 16 de octubre de 2012

La emoción de los pequeños detalles

                               CRÍTICA DE CINE: LO IMPOSIBLE

Siempre que un director tiene un gran éxito con una primera película, el público y la crítica esperan con ganas la llegada del segundo largometraje. J.A. Bayona sorprendió gratamente con El Orfanato en 2007 y claro, cuando pasado el tiempo, se sabe que el siguiente proyecto es mucho más ambicioso, la expectación es máxima. Pero Bayona, con Lo Imposible, no defrauda en absoluto, porque su cine se nota que está impregnado de emoción y sentimientos independientemente del género que trate.

En esta ocasión construye un poderoso drama alrededor de la historia verídica de una familia que sobrevivió al tsunami asiático de 2004, donde los efectos especiales y componentes tan humanos como el amor, la solidaridad o el espíritu de supervivencia se dan de la mano con la misma fuerza que tuvo ese desastre de la Naturaleza.
Naomi Watts y Tom Holland, madre e hijo en el filme de Bayona
Bayona centra la atención en una familia, un matrimonio con tres hijos, pero no deja de lado la importancia de los seres anónimos que también lucharon por sobrevivir y encontrar a los suyos. El guión de Sergio G. Sánchez combina la angustia y la desesperación con gotas de sentimiento que calan en el espectador. Pequeños gestos como una caricia, un abrazo, un beso, una mirada de comprensión, aunque sea entre dos personas que eran desconocidas hasta entonces, cobran gran valor ante una catástrofe de dimensiones colosales y mayor fuerza emocional gracias a la poderosa banda sonora de Fernando Velázquez.

Lo Imposible aboga por un realismo donde el dolor físico y emocional casi se hacen carne. Gracias en gran medida a las interpretaciones de los actores, desde esa descomunal Naomi Watts, hasta ese personaje anónimo encarnado por Marta Etura. Watts hace un alarde interpretativo donde el espectador sufre con ella y por ella, mientras vemos cómo su personaje y su hijo mayor (Tom Holland), todo un descubrimiento, intentan abrirse paso en la desolación. Por su parte, Ewan McGregor demuestra su versatilidad interpretando a un padre de familia y marido ejemplar sin artificios, con un amor por los suyos demostrado en una escena que le puso un nudo en la garganta al que escribe estas líneas.
Ewan McGregor, protector padre de familia
Con un equipo técnico brillante, Bayona demuestra la calidad de los profesionales de los que se rodea. Bravo por los efectos especiales y especialmente, el equipo de maquillaje para mostrar las huellas que el tsunami ha dejado en la piel de los supervivientes, un trabajo hecho milimétricamente en favor, una vez más del realismo.

Bayona demuestra con Lo Imposible no tenerle miedo a una película con un punto de partida tan potente como un desastre natural. Un reto del que ha salido con Matrícula de honor gracias a ponerle a este filme un ingrediente fundamental: Corazón

2 comentarios:

  1. ME HA ENCANTADOOOOO Y TU CRÍTICA DE 10.
    ENHORABUENA ALEX.

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  2. No me convencía del todo verla, pero después de tu crítica creo que merece la pena.

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