martes, 6 de noviembre de 2012

Dos jornadas del SEFF'12 llenas de películas y documentales para todos los gustos

Por problemas tecnológicos no pude ofrecer ayer mi crónica diaria del Sevilla Festival de Cine Europeo. Por lo tanto, voy a resumir estos dos días de la manera más amena posible.

En cuanto a la Sección Oficial se han presentado películas muy diferentes: El lunes se pudo ver À perdre la raison del director belga Joachim Lafosse es un potente drama que huele a premio, en el que el espectador presencia la desintegración de una familia y, más específicamente de la mujer, la cual llega a perpetrar una de las acciones más atroces que una madre puede realizar. La actriz Émilie Dequenne, (premiada en el Festival de Cannes) ofrece una interpretación sobrecogedora, donde se ve su deterioro en un matrimonio con familia numerosa en el que no es feliz. También el lunes pudo verse el filme Me Too del ruso Aleksei Balabanov, en el que un peculiar grupo de personas parten en búsqueda del denominado campanario de la felicidad, en un viaje que no deja de sorprender.
Fotograma de À perdre la raison
Por su parte, ayer llegó la cita con uno de los veteranos maestros del cine europeo: el centenario Manoel de Oliveira. En esta ocasión pudo verse su nuevo filme, Gebo et l'ombre que narra un particular choque familiar y generacional con un trío de actores de lujo: los también veteranos y venerados Jeanne Moreau, Claudia Cardinale y Michael Lonsdale.
Claudia Cardinale y Jeanne Moreau en Gebo et l'ombre
A mediodía se pudo ver la película española Recoletos (arriba y abajo) del siempre personalísimo Pablo Llorca. El director de Todas hieren plasma un trozo de vida centrado en un piso del Paseo madrileño del título, fijando la mirada en Jaime (Jaime Pujol, recordado por la serie El Comisario), hombre casado e infiel que no ve con buenos ojos la llegada del nuevo portero de su edificio (Cesáreo Estébanez, el recordado sargento Romerales de la serie Farmacia de guardia), con el que le une el pasado. En un aperitivo con los medios Llorca declaró que diversas situaciones, como la infidelidad del protagonista  "no tiene trascendencia" y con respecto a la película en sí reconoció que la realidad "se coló" durante el rodaje. En el filme destaca la mirada que pone sobre una vecina del inmueble. Sin embargo, Llorca reconoció que fue para "esbozar una vida concreta, pudiendo haberme fijado en cualquier otro de los vecinos.
Pablo Llorca, a la izquierda en el aperitivo con los medios   Alejandro Reche
Por la tarde se proyectó la película austriaca The shine of day de Tizza Covi y Rainer Frimmel, quienes ya dejaron un buen sabor de boca con La Pivellina. Ahora nos plantean una película de buenos sentimientos centrada en un actor teatral de éxito que se reencuentra con su tío. El encuentro da lugar a escenas entrañables entre ambos donde se ve cómo se ayudan mutuamente  y a los demás, se cuentan vivencias y se quieren a pesar del tiempo que llevan sin verse. El tío está interpretado por Walter Saabel (premiado en Locarno por este filme), que se merecería ganar el premio de interpretación si no rondara por esta sección competitiva Mads Mikkelsen.
Fotograma del filme autriaco The shine of day
De otras secciones destacaron Lebanese Rocket Society, documental dirigido por Khalil Joreige y Joana Hadijithomas sobre el desconocido para muchos programa espacial del Líbano, que se desarrolló en los años 60. Joreige explicó en rueda de prensa que el documental "es un homenaje a los soñadores de esa época". Por su parte, en Gipsy Davy (visto en Sundance), la directora Rachel Leah Jones, cuenta la historia de su propio padre, un americano originario de Alabama que decide convertirse en guitarrista flamenco, con el nombre artístico de David Serva.

Finalmente el martes se presentaron dos de los platos fuertes de la sección EURODOC: Volar de Carla Subirana, donde se muestra la vida en el interior de la Academia General del Aire, y Marcos, el lobo solitario, de Gerardo Olivares, que retoma el personaje real en el que basara su exitoso filme Entrelobos, una persona que se crió en el monte. Sobre sus respectivos trabajos, Subirana destacó que lo más complicado "fue conseguir el permiso de acceso" y que colocó cámaras "dentro de los aviones". Finalmente afirmó que el rodar documentales sobre el ejército ya se ha hecho en otros países, "aquí (por España) esto no se ha visto. Ya en los 70 se hizo uno en Estados Unidos, Basic Training de Frederick Wiseman".
Gerardo Olivares y Carla Subirana en la rueda de prensa Alejandro Reche
Por su parte, Gerardo Olivares declaró que su documental "se basa en la convivencia con Marcos Pantoja (que fue grabando) durante estos años". Para llevarlo a cabo Olivares dijo que prefirió "seguir a Marcos y que él llevara el hilo conductor. Se muestran ocho o diez minutos de Entrelobos, que se centraba en su vida en el monte, y se presencia el reencuentro con familiares que llevaban cincuenta años sin verle".       

1 comentario:

  1. TIENES QUE ESTAR EN UN GRAN MEDIO DE COMUNICACIÓN YAAAAAAAA.
    NO HE VISTO PERSONA MAS TRABAJADORA, CONSTANTE, PROFESIONAL Y TAN....ME LLEVARIA ESCRIBIENDO Y NO PARARIIIA.
    QUE ORGULLOSA ME SIENTO DE TI Y COMO TE LO ESTAS CURRANDO AMORE.
    MIL BESOS BROTHER, ALGÚN DÍA TU TRABAJO SE VERA RECOMPENSADO, PORQUE LO VALES Y MUCHOOOOOO.

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