Fe, ingenio y porcelana

      CRÍTICA CINEMATOGRÁFICA: OZ. UN MUNDO DE FANTASÍA

Ya adelanté en un artículo temático Cómo ha cambiado el cuento  los filmes que nos iban a llegar tomando como premisa cuentos ya conocidos. Esta semana se ha estrenado de manera casi simultánea en todo el mundo Oz. Un mundo de fantasía una ingeniosa precuela de la conocida historia El mago de Oz, surgida de la mente del escritor L. Frank Baum y que en el cine inmortalizó el filme de 1939 protagonizado por Judy Garland, que encarnaba a la inocente Dorothy

Ahora, en el año 2013, el visionario productor Joe Roth, responsable de éxitos como Alicia en el País de las Maravillas (Tim Burton, 2010) o Blancanieves y la leyenda del cazador (Rupert Sanders, 2012), se encarga de contarnos el origen del famoso mago que habita en Ciudad Esmeralda.

El cuarteto protagonista del filme

La película tiene una fuerza visual importante, con un mundo mágico de ensueño donde los elementos de la Naturaleza cobran mucha importancia y embellecen el filme absolutamente. Esto se ve reforzado por la sólida dirección de Sam Raimi que se rodea de un grupo de profesionales de primer nivel.

En el apartado de los actores Raimi vuelve a contar con James Franco, como ya hiciera en su trilogía Spiderman, encabezada por Tobey Maguire, donde encarnaba al hijo del Duende Verde, para que interprete al mago. James Franco, aporta elegancia y picardía al personaje y se ve que le van las precuelas con simios ya que encabezó El origen del Planeta de los Simios (Rupert Wyatt, 2011), y en este filme un mono con alas se convierte en uno de sus compañeros inseparables junto con una muñeca de porcelana que se convierte en una gran robaescenas y aporta una gran dosis de emoción y sentimiento a la historia.

Con respecto al resto del reparto principal, Raimi elige a tres actrices de primera para encarnar a tres brujas: Rachel Weisz, Michelle Williams y Mila Kunis. Las tres hacen un trabajo impecable, pudiendo ver, dependiendo de la bruja que se trate (y no pienso desvelar qué bruja interpreta cada una) desde la más absoluta bondad hasta la máxima maldad.

En el apartado técnico destaca la dirección de producción de Robert Stromberg, ganador de dos Oscar a la Mejor Dirección Artística, por Avatar (James Cameron, 2009) y la ya mencionada Alicia en el País de las Maravillas. La película está llena de imaginativos hallazgos como China Town (que dejo al espectador que la descubra). También destaca la banda sonora compuesta por el siempre eficaz Danny Elfman, inseparable del cine de Tim Burton.

La entrañable muñeca de porcelana

La película, con Disney en la producción, de hecho se usa una de las frutas más popularizadas por estos estudios en un momento importante de la historia, es una sucesión de bellas imágenes que engrandecen una historia muy bien hilvanada para que se entienda todo lo que se encuentra Dorothy al llegar a Oz, y que demuestra que las buenas ideas son a veces mejor que la propia magia.