sábado, 9 de marzo de 2013

Desenfreno con freno

         CRÍTICA CINEMATOGRÁFICA: LOS AMANTES PASAJEROS

Pedro Almodóvar ha vuelto a la comedia, lo hace con un reparto que quita el hipo, una trama heredera del cine catastrófico aéreo como la saga iniciada con Aeropuerto (George Seaton, 1970) y sus parodias como Aterriza como puedas (Jim Abrahams, David y Jerry Zucker, 1980), y unos diálogos marca de la casa que la identifican como una película del director manchego.

La comedia almodovariana, con su cumbre en la extraordinaria en Mujeres al borde de un ataque de nervios (1988), se ha quedado, en el caso de Los amantes pasajeros en un nivel más superfluo. Todo el entramado tiene mucho potencial, dando la sensación de que, no sabemos por qué, Almodóvar podía haber añadido mucha más sal gorda y mucha más locura (y ya tiene) de la que se muestra en la película.
Javier Cámara, Raúl Arévalo y Carlos Areces en el filme
Con una versión más rítmica y alegre de Para Elisa de Beethoven y unos títulos de crédito de apertura con mucho colorido, el filme promete fiesta y  nos presenta una serie de personajes que podrían dar lugar a películas independientes: La pareja formada por Antonio Banderas y Penélope Cruz, el personaje de Lola Dueñas o los pilotos y el personal de vuelo del avión.

Parece que Almodóvar ha presentado una especie de muestrario de lo que podría desarrollar en próximas películas, aunque no sabemos sus intenciones para el futuro. 

Lo que sí se nota es que podía haber echado más carne al asador. El comedimiento ha sido una de las características de esta película donde situaciones que suben la temperatura carecen de la explicitud  de otros títulos de su filmografía como La ley del deseo (1987) o Carne trémula (1997), ya que el tono cómico de este filme daba motivos de sobra para mostrar con más alegría cuerpos lozanos, sobre todo teniendo a actores deseados como Miguel Angel Silvestre o Hugo Silva en el reparto, por lo que se ve que es una elección argumental tomada a conciencia, cuando los diálogos sí son explícitos con respecto al sexo.

Con logrados momentos como el baile coreografiado por Blanca Li de los azafatos (portentosos Javier Cámara, Carlos Areces y Raúl Arévalo) al ritmo de la canción I'm so excited de The Pointer Sisters, referencias a la más rabiosa actualidad y el partido que le saca a algunos intérpretes (Blanca Suárez está especialmente guapa en este filme), Los amantes pasajeros es un ligero divertimento en la línea cómica de Almodóvar, pero en su variante menos loca y gamberra de lo que se esperaba y que, con el material de partida, podía haberlo sido en mayor medida. En definitiva, queremos más locura, y no es que el filme carezca de ella.

1 comentario:

  1. Muy buena crítica, Alejandro. Yo creo que Almodóvar podría haber creado una buena comedia en lugar de quedarse en una cinta que, simplemente, se deja ver. Buen reparto con la sobresaliente interpretación de Javier Cámara, Carlos Areces y Raúl Arévalo. Al otro lado, rostros mediáticos como los de Silvestre o Silva, que podría haber aprovechado para descubrir algún nuevo talento que no sea tan sólo una cara bonita. En cuanto a Blanca Suárez..., sí, muy bella, pero se queda en un papel simple (tanto en contenido como en interpretación), me sobra su personaje y, por tanto, los de Paz Vega y Guillermo Toledo. A mí, particularmente, no me aportan nada. 'Hacer por hacer', esa es la impresión con la que me han dejando estos amantes pasajeros de Pedro Almodóvar. Me han faltado sus brillantes planos, su humor coloquialmente trabajado. Incluso Alberto Iglesias, que me fascina, se me queda en una composición sencillamente correcta. Buen marketing para una película a la que no se le puede pedir mucho porque te puede dejar con mal sabor de boca. Por mi parte, la dejo a la cola de sus producciones. Eso sí, para gustos..., colores!!

    ResponderEliminar