martes, 29 de marzo de 2011

Farley Granger se baja del tren de la vida

Acabo de leer la noticia del fallecimiento del actor Farley Granger, a los 85 años. Con él se marcha uno de los supervivientes de la época dorada de Hollywood. Este actor comenzó a despuntar ya en los años 40 y fue gracias al maestro del suspense Alfred Hitchcock. Puede que no sea un nombre muy reconocible a primera vista o lectura en este caso, pero fue protagonista de dos de las películas de suspense más famosas de Hitchcock.
Farley Granger (1925-2011)
En 1948 protagoniza junto a James Stewart la magistral "La Soga" (1948), soberbio ejercicio de intriga basado en un suceso real relacionado con el asesinato cometido por dos estudiantes universitarios. Granger interpreta a uno de ellos y el suspense está garantizado gracias al hecho de que esconden el cadáver en un baúl. Es una película en la que se va al grano, porque incluso no llega a los 80 minutos de duración.
Granger con James Stewart en "La Soga"
Pero la colaboración con Alfred Hitchcock no acabó aquí, ya que Farley Granger fue el elegido para ser uno de los protagonistas principales de "Extraños en un tren" (1951), la adaptación, con algunos cambios, de la famosa novela de Patricia Highsmith, la creadora del inquietante Tom Ripley. En este filme, en cuyo guión participó el escritor de novela negra Raymond Chandler, Granger interpreta a un hombre que se encuentra por casualidad a un tipo(Robert Walker) que le propone llegar a un acuerdo para que cada uno de ellos mate a una persona que al otro incomoda. Esta película es otro gran ejemplo de la maestría de Hitchcock para mantener el suspense hasta el final y rodada en un esplendoroso blanco y negro.
Granger con Robert Walker en "Extraños en un tren"
El talento interpretativo de Farley Granger fue apreciados por otros directores con universos y estilos muy personales como el italiano Luchino Visconti, con quien Granger rodó "Senso" (1954), un filme histórico amoroso ambientado en Venecia.

Más adelante, participó en uno de los éxitos del dúo formado por Bud Spencer y Terence Hill "Le llemaban Trinidad" (Enzo Barboni, 1970), y su presencia fue frecuente en la televisión en series como "Vacaciones en el mar" o "Se ha escrito un crimen". Farley Granger puede que para muchos sólo sea recordado por los dos filmes que hizo con Hitchcock pero, para mí, es suficiente, descanse en paz.

sábado, 26 de marzo de 2011

Teatro de calidad al cuadrado

              CRÍTICA TEATRAL: "AMAR EN TIEMPOS REVUELTOS"

Acabo de llegar de ver la obra de teatro "Amar en tiempos revueltos" y he llegado a casa muy satisfecho con lo que he visto. Eso sí, tiene más mérito el que me haya gustado porque al ser seguidor de la serie de la que parte, sabía prácticamente todo lo que iba a ocurrir en la trama, como así pasó. Reconocí la mayoría de las situaciones que se planteaban y aprecié también las ligeras modificaciones introducidas para así lograr comprimir una trama que se desarrolla durante toda una temporada, la quinta para ser exactos, en una función de dos horas.

Hay dos elementos destacables: las interpretaciones y la puesta en escena. El reparto está compuesto por actores que en su mayoría han trabajado en la serie de televisión, incluso algunos, cuatro para ser exactos repiten el personaje que hacían en la pequeña pantalla. Me refiero a Cayetana Guillén Cuervo, espléndida  y perfecta como la diva del teatro Estela del Val, además con unos vestidos espectaculares, Jaume García y Verónika Moral, que retoman sus personajes del matrimonio formado por Cristina Barea y Abel Zamora, el cual tiene unas escenas donde se le ve atormentado y presa de la locura que son impresionantes, y Sebastián Haro, como Gabino Cifuentes. 

Por otro lado Antonio Valero (que hizo de Hipólito Roldán en la tercera temporada de la serie) recoge el testigo de Pep Munné encarnando al escritor Salvador Bellido, primo de Abel. De igual modo, el joven Jaime Menéndez, que interpretaba a Sito Robles en las dos primeras temporadas de la serie, encarna a Luisito Valdés, un actor al que contrata Estela del Val. Finalmente Lara Grube interpreta el papel de Rosa que hacía en la serie Bárbara Lennie y Ricard Borras encarna a Marcos de la Vega en sustitución de Miguel Mota.
Calificación de la interpretación del conjunto: 10. Todos tienen sus momentos para lucirse y en el caso de varios de ellos como Cayetana Guillén Cuervo, Lara Grube o Ricard Borras hacen doble o triple papel, en el caso de Jaime Menéndez, ya que hay que tener en cuenta que la obra "Amar en tiempos revueltos" cuenta la historia de una compañía que pone en pie una obra de teatro "El diablo bajo la cama", y el espectador ve también la representación de fragmentos de esa obra dentro de la función en conjunto.

Con respecto a la puesta en escena, se nota que es una obra de teatro en la que se reivindica el amor a las tablas y a los textos de los autores. Porque el espectador ve claramente cómo se van transformando la mayoría de los decorados de manera manual y, por otro lado, se reivindica el derecho a poder desempeñar el oficio de actor en tiempos turbios o revueltos, como la serie titula.

El final de la obra ha sido emotivo, con el público aplaudiendo a raudales y Antonio Valero dirigiéndose al mismo mencionando el hecho de tener una compañía donde los sevillanos directa o indirectamente, están presentes, y haciendo subir al director de la función, Antonio Onetti.

En resumen, una gran obra que parte de una gran serie, donde se demuestra que los creadores y guionistas están en estado de gracia

jueves, 24 de marzo de 2011

Cayetana Guillén Cuervo: "Con el personaje de Estela del Val fui haciendo una creación con grietas de humanidad"

El teatro Lope de Vega de Sevilla acoge desde mañana la obra "Amar en tiempos revueltos", inspirada en la serie homónima que lidera cada día, después de más de 1.300 episodios , las sobremesas. Dirigida por uno de los creadores de la serie, Antonio Onetti, la obra toma como punto de partida una de las líneas argumentales de la quinta temporada.

Ambientada en el mundo del teatro, recupera varios personajes como Estela del Val, Abel Zamora o Cristina Barea que vuelven a ser interpretados por los actores que los encarnaron en la serie. La obra está encabezada por Cayetana Guillén Cuervo. Actriz de larga trayectoria, ha pisado las tablas de un teatro desde que tenía uso de razón, ya que es hija de dos grandes figuras de la interpretación de este país: Fernando Guillén y Gemma Cuervo. Pues bien, tras la rueda de prensa, contestó amablemente a una serie de preguntas para este blog.
Cayetana Guillén Cuervo, hoy en Sevilla

Pregunta: ¿El espectador de la serie verá algo diferente en la obra de teatro o todo lo que ocurre en la obra ocurría en la serie?

Respuesta: El argumento se inspira en la trama, pero hay novedades y la puesta en escena es muy valiente, moderna, atrevida y tiene un compromiso político que yo subrayo porque me parece muy valiente y muy necesario por lo que estamos contando. Hablamos de escritores represaliados, de censura, de la situación de la mujer, de enfrentamiento con el régimen de Franco y entonces la función es muy convulsa en ese sentido.

P: Concha Piquer dijo una vez en una entrevista "A mí no me pisa el poncho nadie" ¿Esta frase podría adecuarse a su personaje, Estela del Val?

R: Sí ,sí. Estela del Val diría esa frase como dice otras de esas características. Es un tipo de actriz que ya no existe, es una diva, que mi padre me contaba que no se las podía tocar en el escenario. Había un dicho que era: El que toca manda. Todo el mundo la llamaba de usted, pero con 30 o 40 años, no te creas que con más edad. Tenían un poder, eran empresarias, prácticamente dirigían ellas las funciones. Era difícil acercarse a ellas, había un protocolo que no existe en este momento. Era como la Bette Davis de "Eva al desnudo" aterrorizada con Anne Baxter que le quería quitar el lugar y realmente era una mujer sola, vulnerable, llena de  miedos y se tenía que defender constantemente de la sociedad para mantenerse en el lugar que había conquistado.

P: Con la evolución que tuvo su personaje en la serie ¿puede decir si usted aportó algo a Estela del Val?

R: Sí, el personaje era de una manera y yo fui haciendo una creación con más grietas de humanidad, para que el público entendiera por qué ella podía ser soberbia o dura en determinadas ocasiones, que entendiera su soledad, por qué se inventaba su pasado viniendo de una familia humilde, todo para mantener su lugar y poder poner funciones en pie. Fui aportando sobre todo humanidad y detalles de comprensión que mis padres me han contado a la vez y que yo podía aportar  al personaje con conocimiento de causa.

P: ¿Su personaje volverá a la serie de manera puntual?

R: Voy a grabar uno de esos capítulos especiales que se hacen para la 1 por la noche, protagonizado por Estela del Val, en mayo, como el que se hizo con Hipólito Roldán (de la tercera temporada).

P: ¿Qué cree que tiene "Amar en tiempos revueltos" para que haya enganchado a tanta gente tanto en la televisión como el teatro?

R: Está  escrita por tres de los dramaturgos vivos más importantes de España, que son Benet, Sirera y Onetti. Eso es una garantía. Y para mí lo más importante del proyecto siempre es el guión, el texto, sin eso no hay nada. Pues yo creo que "Amar" ha contado con el talento de estos tres escritores. Aparte habla de la Historia de España, de personajes reconocibles. Todo el mundo tiene un primo, un marido, un tío que es como el personaje de la serie. A todo el mundo le han matado a alguien en la Guerra Civil. Hay emociones y heridas  compartidas con los personajes y eso hace que funcione.

P: El hecho de que sus padres se dediquen a su misma profesión ¿le ha hecho ver la profesión desde otra perspectiva diferente?

R: Claro, igual que mi hijo, que tiene cinco  años, ha visto la función dieciséis veces. Está todo el día en los camerinos, entre cajas, pues así era yo de niña. Para mí lo normal era estar en las rodillas de un escritor, un director, estar en tertulias, ver a mis padres estudiando los textos, estar rodeada de textos de los dramaturgos más importantes, salir al escenario y entonces eso lo normalizas y se hace, de alguna manera creces y continúas ahí.

FOTO: ALEJANDRO RECHE SELAS

miércoles, 23 de marzo de 2011

Adiós a Elizabeth Taylor

Ha fallecido Elizabeth Taylor. La mítica actriz nos ha dejado poco tiempo después de cumplir 79 años. Es una noticia triste, porque es de las actrices que crees que nunca nos dejarán. Con motivo de esta noticia voy a dejar mis impresiones de los trabajos que he podido ver de ella. 
Elizabeth Taylor (1932-2011)
 Es curioso cuando la descubrí, sin saber que era ella, en el reparto de "Mujercitas" (Mervin Le Roy, 1949) como una de las hermanas que conformaban esta entrañable historia al lado de las bellas June Allyson, Janet Leigh y la pequeña Margaret O'Brien. Todavía recuerdo la gracia que me hacía Taylor con esa pinza en la nariz para dormir. Puedo decir que vi una de sus últimas actuaciones en el cine, interpretando a la suegra de John Goodman en "Los Picapiedra" (Brian Levant, 1994). A los trece años, cuando vi este filme, aún no era consciente de la carrera de esta bella mujer. 

Aunque no he visto todas sus películas, he de admitir que las que he visto me han dejado huella. Aunque ganase dos Oscar a la Mejor Actriz, por "Una mujer marcada" (Daniel Mann, 1960) y "¿Quién teme a Virginia Woolf?" (Mike Nichols, 1966) creo desde mi modesta opinión que debería haber ganado por dos personajes anteriores, ambos salidos de la imaginación del dramaturago Tennessee Williams: su papel de Maggie en "La gata sobre el tejado de zinc" (Richard Brooks, 1958) haciendo una explosiva pareja con Paul Newman, es de una intensidad admirable, así como su trabajo en la polémica "De repente, el último verano" (Joseph L. Mankiewicz, 1959) junto a su amigo Montgomery Clift y Katharine Hepburn. Esta película contiene una de las tramas más fuertes que yo he podido contemplar. Por su contenido, no pretendo contar mucho, animando a los lectores de este post a que la adquieran y la vean. Sólo puedo decir que el personaje de Taylor tiene un trauma y al final de la película consigue contarlo y liberarse de él. Pues los gritos que hace en los momentos finales de la confesión son sencillamente desgarradores. Esta predilección por los temas "fuertes" lo constató con su participación en "Reflejos en un ojo dorado" (John Huston, 1967) haciendo de esposa de un reprimido Marlon Brando. 
Elizabeth Taylor en "De repente, el último verano" (1959)
 La verdad es que la carrera de Taylor es envidiable desde que debutó en los años 40 siendo una niña y acompañando a la perra Lassie, pero claro, alguien que ha hecho "Gigante" (George Stevens, 1956) o Cleopatra (Joseph L. Mankiewicz, 1963) es digna de admiración. Su validez era tal que no le importó compartir plató con grandes actores en una trama coral como la de "El espejo roto" (Guy Hamilton, 1980), una trama de Agatha Christie donde aparecían Angela Lansbury, Tony Curtis, Kim Novak, Geraldine Chaplin o su gran amigo Rock Hudson.

Incluso sus apariciones episódicas en series de televisión como "Norte y Sur" o "La Niñera", aunque fueran breves, eran igual de atractivas para el espectador que si viese una película protagonizada por ella.  
Desde mi modesta opinión su vida sentimental, bastante agitada, y con una tormentosa relación con Richard Burton, no importa mucho, ya que demostró unas cualidades interpretativas que iban más allá de su hermosura. Una vida intensa para una actriz hermosa que ha marcado a varias generaciones, la mía incluída. Pero afortunadamente nos quedan sus películas para poder verla cuando queramos y admirar esos ojos que hipnotizaron a más de uno. Descanse en paz, Elizabeth, "Liz" Taylor.

lunes, 21 de marzo de 2011

Manolete ¿en un DVD te metes?

Los tiempos han cambiado. Cuando uno podía creer que rodar y estrenar en España una película era más complicado hace 50 años, donde los presupuestos y la censura eran los principales inconvenientes, hoy en pleno siglo XXI nos encontramos con casos inexplicables. Me refiero al filme "Manolete", protagonizado por Adrien Brody y Penélope Cruz. La película sobre la vida del ilustre torero ha visto postergado su estreno en España continuamente sin dar una explicación convincente para esta situación, mientras que en otros países europeos se ha podido ver sin ningún problema.
Ahora la última novedad sobre el tema es su salida directamente en DVD para poder ser comprado a través de Internet, un triste final para una película que mereció más suerte en términos de exhibición y quién sabe si estos inconvenientes no la terminan convirtiendo en una película de culto, porque todos estos problemas no hacen otra que incrementar la curiosidad de la gente.

Esta situación me sirve para reflexionar cómo ha cambiado el panorama en el cine, ya que desde sus comienzos las películas ambientadas en el mundo del toreo eran muy habituales y gozaban de gran popularidad, interesando incluso al Hollywood clásico. Sin ir más lejos, la novela "Sangre y arena" de Vicente Blasco Ibáñez tuvo varias adaptaciones a la gran pantalla. Entre ellas destacan tres: La versión muda de 1922 protagonizada por Rodolfo Valentino, la dirigida en  1941 por Rouben Mamoulian y protagonizada por Tyrone Power y Rita Hayworth y finalmente la versión de 1989 protagonizada por !Sharon Stone¡, aunque hay que decir que es la de menor calidad de las tres según mi opinión personal.
En España, como es lógico el cine centrado en el mundo del toreo ha sido desde siempre un tema recurrente ya fuera el eje central del argumento o como parte del mismo. Al igual que con "Sangre y arena", ha habido otra historia que ha conocido varias versiones. Me refiero a "Currito de la Cruz", también de origen literario, ya que se basa en una novela de Alejandro Pérez Lujín, el cual se encargó de dirigir la primera versión para el cine, en 1925. Luego hubo una segunda versión en 1936 de la mano de Fernando Delgado, pero las que gozaron  de un mayor grado de popularidad fueron las dos siguientes versiones: En 1948, el torero recientemente desaparecido Pepín Martín Vázquez protagonizó la nueva versión de la historia a cargo del director Luis Lucia y con actores consagrados en el reparto como Tony Leblanc o Jorge Mistral. 
Finalmente, en 1965 Rafael Gil eligió a El Pireo para encarnar al protagonista acompañado por Francisco Rabal, Arturo Fernández y Soledad Miranda. Precisamente el gran Rabal tiene en su filmografía otros títulos vinculados a los ruedos y a los trajes de luces. Por ejemplo, "Los clarines del miedo" (Antonio Román, 1958) o "A las cinco de la tarde" (Juan Antonio Bardem, 1961). Pero el papel por el que será siempre recordado será el de la serie "Juncal" (Jaime de Armiñán, 1989) donde interpreta a un ex torero que decide volver a ganarse la confianza de su hijo, un aspirante a triunfar en los ruedos. El reparto incluía a Rafael Alvarez "El Brujo, Carmen de la Maza, Lola Flores o Mercedes Hoyos
En la nómina de directores que han tratado el mundo del toreo, habría que destacar al húngaro Ladislao Vajda que, tras triunfar con "Marcelino pan y vino" (1955) se adentró en los ruedos en otros dos éxitos: "Tarde de toros" (1956), donde aparecen los diestros Antonio Bienvenida, Enrique Vera y Domingo Ortega, y "Mi tío Jacinto" (1957).

Aparte de estas aproximaciones, en España hubo una moda consistente en que toreros en la vida real fueran los protagonistas de sus propias películas,  aunque les cambiasen los nombres, para así aprovechar su popularidad de cara a la taquilla como "El Cordobés" en "Aprendiendo a morir" (Pedro Lazaga, 1962) y "Chantaje a un torero" (Rafael Gil, 1963),Palomo Linares en "Nuevo en esta plaza" (Pedro Lazaga, 1966) al lado de grandes actores como José Bódalo, Manolo Zarzo, Alfredo Landa o Julia Gutiérrez Caba" y "Solos los dos" (Luis Lucia, 1968) junto  a Marisol, y Miguel Báez Litri en "El Litri y su sombra"(Rafael Gil, 1960).
Si nos detenemos en el cine más reciente, con la excepción de "Belmonte"(Juan Sebastián Bollaín, 1995), hay que decir que el toreo ha pasado a ser una pieza más de los argumentos de las películas donde predominan otros temas, como es el caso de "Jamón Jamón" (Bigas Luna, 1992) donde una de sus imágenes más recordadas es la de Javier Bardem toreando desnudo por la noche, o dos filmes de Pedro Almodóvar: "Matador" (1986), donde se mezclaba el toreo con una historia de suspense, y "Hable con ella" (2002), donde Rosario Flores interpreta a una torera que sufre un trágico percance al recibir al primer toro de la tarde.

Con todo este recorrido se puede afirmar que "Manolete" ha sido una película hecha en un momento inadecuado y que en otro momento no hubiese tenido los problemas que ha ido arrastrando. Esperemos que el paso del tiempo dé a conocer esta película a un sector del público más amplio, para que así pueda ser juzgada debidamente. Pero mientras tanto habrá que encontrar ese anunciado DVD.

jueves, 17 de marzo de 2011

Duetos inolvidables en español

La entrada de hoy es más para escucharla que para leerla, así que procuraré no extenderme tanto como en el anterior artículo sobre Michael Caine. Siempre me han gustado las actuaciones musicales en las que dos artistas se juntan para cantar una canción que puede ser un éxito de uno de los dos que cantan o un tema original para que lo canten ambos. Hay muchos ejemplos pero yo voy a destacar sólo unos pocos acompañados de sus correspondientes videos.

Voy a empezar destacando dos duetos magníficos que fueron posibles gracias a la tecnología. Hace ya unos años se decidió homenajear a dos grandes cantantes españoles que nos dejaron prematuramente, Cecilia y Nino Bravo. Con tal motivo se editaron unos CDs donde artistas consagrados cantaban con ellos aunque no estuviesen físicamente. La primera canción que voy a referir es la famosa: "Un ramito de violetas", que lanzó a la fama a Cecilia y que conoció una popular versión gracias a Manzanita. Pero el dueto que se realizó fue ni más ni menos que con Julio Iglesias y el resultado de esas dos voces es espléndido. Pinchen con el ratón y escuchen:
De igual modo, el inolvidable Nino Bravo tuvo su homenaje con duetos con Francisco cantando "Libre", "Cartas amarillas" con Sergio Dalma o una versión con Paloma San Basilio de "Te quiero, te quiero" que es la que deseo que escuchen por la belleza de las voces y de la letra de la canción.
Las siguientes canciones que mencionaré a continuación tienen en común con las anteriores el hecho de que también intervienen en ellas dos cantantes tristemente desaparecidas pero cuyo arte sobre el escenarios fue constatado durante muchos años. En primer lugar, Rocío Dúrcal, aparte de ser una maestra cantando rancheras, demostró a lo largo de su carrera que su hermosa voz se adaptaba a todo y prueba de ello es esta actuación junto al también genial Raphael cantando su gran éxito "Qué sabe nadie", una canción en contra de las habladurías sobre la vida privada de las personas que se ha convertido en un himno para mucha gente:
Otra actuación que quedará en la memoria de mucha gente tuvo lugar en la última gala que ofreció Rocío Jurado antes de dejarnos para siempre. En esa gala cantó con David Bisbal, Mónica Naranjo, Paulina Rubio, Raphael.... Pero yo me quedo sin lugar a dudas con la versión que hizo con Malú del tema "Se nos rompió el amor". En esta actuación las dos voces por separado son una delicia pero cuando en el tramo final se juntan se produce algo grandioso, juzguen ustedes:
En fin, creo que sobran las palabras. Por último quisiera destacar un tema que para mí fue un descubrimiento por la belleza de su letra: "Romance de Curro el Palmo" de Serrat. Es un tema muy hermoso y triste al mismo tiempo que conoció una versión del propio Serrat con Alejandro Sanz que particularmente me gusta bastante:
Con estos momentos musicales espero que hayan pasado un rato agradable y el oído haya disfrutado. No descarto volver al tema de los duetos más adelante, anticipando que ya será a nivel internacional, que los hay a montones y geniales.

lunes, 14 de marzo de 2011

La impresionante trayectoria de Michael Caine

Hay actores que, cuando alguien se para a revisar su filmografía, no puede hacer otra cosa que no sea asombrarse viendo la cantidad de títulos buenos que contiene, siendo de tal manera que se le puede perdonar los títulos "malos" o "menores" en los que ha intervenido. Este es el caso de Michael Caine, que hoy cumple 78 años, de ahí que me haya decidido a repasar su trayectoria y rendirle mi particular homenaje.
Michael Caine
Centrándonos en lo principal, hay que decir que este gran actor nacido en Inglaterra comenzó su carrera en los 50, pero muchas de sus intervenciones fueron principalmente en la televisión y en el cine los papeles eran o muy secundarios o directamente no aparecía en los títulos de crédito. Hay que llegar al año 1964 para encontrar su primer título importante "Zulú", película de Cy Endfield sobre un episodio bélico vivido por el ejército inglés en Africa.Sólo dos años después,  Michael Caine protagoniza una de las películas que marcaría su carrera "Alfie" (Lewis Gilbert, 1966) donde interpreta a un seductor muy carismático y que lo convirtió en un icono de la época. Este es el comienzo de una serie de éxitos que es difícil resumir de manera escueta por la cantidad de títulos pero lo intentaré de la mejor manera posible y creo que la mejor forma de hacerlo es englobar las películas por géneros, ya que Michael Caine destacó en algunos de manera significativa.
Michael Caine con Shelley Winters en "Alfie"(1966)
En primer lugar, Michael Caine es recordado por sus papeles en las películas de espionaje que proliferaron a partir de los años 60. Caine encabezó los repartos de clásicos del género gracias a su papel de Harry Palmer en títulos como "Ipcress" (Sidney J. Furie, 1965), "Funeral en Berlín" (Guy Hamilton, 1966) o "El cerebro de un millón de dólares" (Ken Russell, 1967). Este personaje lo recuperaría en los 90 en los filmes "El expreso de Pekín" (George Mihalka, 1995) y "Medianoche en San Petersburgo" (Douglas Jackson, 1996). 

Aparte de estos títulos, donde interpretaba al mismo personaje, Caine intervino en películas de suspense como "Asesino Implacable" (Mike Hodges, 1971), dando vida al gangster Jack Carter, "El molino negro" (Don Siegel, 1974), "El pacto de Berlín ( John Frankenheimer, 1985) o la intrigante "El cuarto protocolo" (John Mackenzie, 1987), donde compartía protagonismo junto a Pierce Brosnan.
Caine en "Asesino Implacable" (1971)
Otro género en el que destacó Caine fue en el bélico, participando en un puñado de buenos títulos como "Mercenarios sin gloria" (André de Toth, 1969), "La batalla de Inglaterra" (Guy Hamilton, 1969) o "Un puente lejano" (Richard Attemborough, 1977), con compañeros de reparto de la talla de Sean Connery, Gene Hackman, Laurence Olivier o Robert Redford.

Algunos de estos actores trabajaron con  Michael Caine en otros tiulos destacables. Con Laurence Olivier coprotagonizó la magistral "La Huella" (Joseph L. Mankiewicz, 1972) donde los dos actores tienen un memorable, sorprendente e intenso duelo interpretativo. En 2007 Caine haría un remake de esta película, dirigido por Kenneth Brannagh, haciendo el papel de Olivier, mientras que su papel lo haría Jude Law, al que consideran al heredero de Caine, ya que incluso Law protagonizó el remake de "Alfie" en 2004.
Caine con Laurence Olivier en "La Huella" (1972)
Sean Connery sería, por otro lado, el compañero de Caine en "El hombre que pudo reinar (John Huston, 1975) otra cinta de aventuras, en este caso en India. Otro compañero de reparto destacado fue Omar Sharif en "El último Valle" (James Clavell, 1971), filme ambientado en la Guerra de los Treinta Años. También compartiría horas de trabajo junto a Sylvester Stallone en la popular "Evasión o Victoria" (John Huston, 1981) donde intervenía además el fubolista Pelé. Con Stallone intervendría en el remake de "Asesino Implacable", que en España mantuvo el título original de ambas, "Get Carter" ( Stephen Kay, 2000).

Aparte de estos grandes títulos, la carrera de Caine tiene  otros trabajos con magníficas interpretaciones que le valieron muy buenas críticas. Por ejemplo, en "Ha llegado el águila" (John Sturges, 1976) interpretó magníficamente a un coronel alemán y estuvo magnífico en "Educando a Rita" ( Lewis Gilbert, 1983) nuevo trabajo con el director de "Alfie", y sorprendió con su papel en "Vestida para matar" (Brian de Palma, 1980).  

Michael Caine en "Vestida para matar" (1980)
La comedia tampoco ha faltado en la carrera de Michael Caine, siendo muestra de ello sus intervenciones en "California Suite" (Herbert Ross, 1978) junto a Maggie Smith, Jane Fonda, Alan Alda y Walter Matthau. Otra comedia destacada en la trayectoria de Caine es "!Qué ruina de función" (Peter Bogdanovich, 1993) donde dirigía una desastrosa obra de teatro. También ha sido compañero de Sandra Bullock en "Miss Agente Especial" (Donald Petrie, 2000) y de Mike Myers en "Austin Powers en miembro de oro" (Jay Roach, 2002).

A lo largo de su carrera Caine no ha tenido reparos en intervenir en películas que fueron fracasos comerciales a pesar de contar con elementos para que no lo fueran como las "catastróficas" "El enjambre" (Irwin Allen 1978) a pesar de contar con un reparto espectacular que contaba con Olivia de Havilland o Henry Fonda. Tampoco funcionó "Más allá del Poseidón" (Irwin Allen, 1979) la secuela de la exitosa "La aventura del Poseidón" (Ronald Neame, 1972). Por último, "Tiburón, la venganza" (Joseph Sargent, 1987) fue la última secuela del famoso filme de Steven Spielberg.

A pesar de estos últimos títulos, la grandeza de Caine se demuestra con un hecho: A lo largo de su carrera ha sido nominado  como Mejor Actor Principal  por las mencionadas "Alfie",  "La Huella", "Educando a Rita" y "El americano impasible" (Philip Noyce, 2002). Sin embargo, los dos Oscar que ha ganado ha sido al Mejor Actor de Reparto, certificando que si se es un gran actor no importa lo largo que sea un papel. La primera estatuilla lo ganó por "Hannah y sus hermanas" (Woody Allen, 1986) y la segunda ocasión en que resultó ganador fue con "Las normas de la casa de la sidra" (Lasse Hallström, 1999), donde venció a su "heredero" Jude Law.
 
Caine en el año 2000 con su segundo Oscar

Sé que me estoy extendiendo más de la cuenta pero al documentarme yo mismo me he sorprendido de los trabajos de Caine. Como por ejemplo, ha interpretado a populares personajes literarios como Sherlock Holmes en "Sin Pistas" (Tom Eberhardt, 1988), en una curiosa vuelta de tuerca al personaje y su universo; también Caine ha interpretado al avaricioso Sr. Scrooge  creado por Charles Dickens en "Los teleñecos en cuentos de Navidad" (Brian Henson, 1992),  de igual modo que al Capitán Nemo ideado por Julio Verne, en una versión para la televisión de "20.000 leguas de viaje submarino" (Ron Hardy, 1997) al lado de Patrick Dempsey, el famoso doctor de la serie "Anatomía de Grey". También para la pequeña pantalla hizo "Jekyl y Hyde" (David Wickes, 1990) interpretando a los dos personajes del título salidos de la imaginación de Robert Loius Stevenson.

En estos últimos años destaca, sobre todo, su vinculación con el director Christopher Nolan que ha dado excelentes resultados: "El truco final" (2006) donde coincide con Hugh Jackman, Scarlett Johansson y Christian Bale.  Con este último repetiría en las nuevas películas sobre Batman que Nolan ha dirigido: "Batman Begins" (2005), "El Caballero Oscuro" (2008) y, supuestamente estará en la tercera entrega que se está preparando en la actualidad "The Dark Knight Rises". Antes Caine trabajó con Nolan en la premiada "Origen" (2010), con Leonardo DiCaprio y Ellen Page.
 
Caine con Christian Bale y el traje de Batman
Me he extendido demasiado pero no podía hacer menos por un actor gigante y versátil, que también presta en la actualidad su voz para películas de animación como "Gnomeo y Julieta" (Kelly Asbury, 2011) o "Cars 2" (John Lasseter y Brad Lewis, 2011), aún no estrenada. Creo que es el artículo más extenso que he escrito en el blog pero hoy no cumple años un actor cualquiera, lo hace Michael Caine y su carrera, como he ido describiendo, habla por sí misma. FELICIDADES SEÑOR CAINE.

viernes, 11 de marzo de 2011

Con tesón y un bolígrafo se puede llegar muy lejos

Eloy Moreno con su primer libro
En los tiempos que corren, de dificultades para salir adelante, es admirable conocer personas con iniciativa propia para conseguir sus objetivos. Este es el caso de Eloy Moreno, un informático de Castellón que un buen día sintió la necesidad de escribir una novela. La experiencia de la escritura no le es ajena porque como él mismo afirma "anteriormente había escrito relatos cortos, hasta que llegó un momento en el que sentí la necesidad de contar una historia que a mí como lector me interesara".

El proceso duró dos años y dio como fruto "El bolígrafo de gel verde" ,una historia cotidiana por lo que el lector no se encontrará una novela de género. Precisamente ese aspecto cotidiano es el que Moreno destaca al hablar de su libro ya que, según él "trata una serie de temas con los que el lector puede sentirse identificado". La novela, a pesar de ser la primera  que escribe Moreno no contiene muchos elementos autobiográficos, como suele suceder  en los comienzos de los escritores, sino que, según sus propias palabras "hay sobre todo referencias a lugares que conozco bien". 

Pero la aventura de Moreno no acabó cuando puso punto final a la historia que narraba en su novela. Él mismo editó y promocionó su libro de una manera muy curiosa. La edición no fue tanto una cuestión de dinero sino más bien de encontrar un lugar donde poder realizar un número de copias aceptables para una demanda asequible. Pero la parte más curiosa del proceso fue la consistente en vender literalmente el libro en librerías, una experiencia calificada por Moreno de "buena, porque la respuesta de la gente fue positiva a una persona que se encontraban con un marca páginas y que les hablaba de un libro que había escrito". Por otro lado, las redes sociales como Facebook jugaron un papel importante, ya que Moreno creó una página dedicada a su novela y la respuesta se tradujo en un interés por el libro que en  la actualidad llega a las 3900 personas interesadas en esta novela.Gracias al grado de popularidad que alcanzó la novela, la Editorial Espasa Calpe, a través de la librería La Casa del Libro, se interesó por el libro de Moreno, un verdadero impulso que atrajo la atención de los principales medios de comunicación: periódicos cadenas de televisión, emisoras de radio etc...

Al preguntarle por sus gustos literarios Moreno declara que es asiduo a la literatura de Juan José Millás o Isaac Asimov. Unos autores distintos entre sí pero que forman parte del background cultural de un escritor hecho a sí mismo y cuya iniciativa debería de ser un ejemplo para muchos, porque Eloy Moreno ha demostrado que con una buena idea, tesón y perseverancia se puede lograr, como demuestra su caso, que la gente aprecie el esfuerzo de alguien deseoso de que aprecien su valía, en este caso como escritor.

miércoles, 9 de marzo de 2011

Felicidades a la bella Ornella Muti

El cine nos ha hecho soñar con sus imágenes, músicas e historias. Pero también, hay que admitirlo, el reclamo de una película es el actor o actriz que en ella aparece, aunque hay que decir que muchas veces, si la historia no es buena, es muy complicado que el actor la salve. Pero centrándonos en el placer visual de una película, se debe afirmar que hay actores cuya belleza, aparte de sus cualidades interpretativas, que en ningún momento digo que no las tengan, son un buen reclamo para gastarte dinero en la sala de un cine. 

Hoy me quiero centrar en una de esas bellezas que apareció en los 70 y que no se ha borrado de la retina de miles de espectadores, la de un servidor incluida. Me refiero a la actriz italiana Ornella Muti, (Roma, 1955) que hoy cumple 56 espléndidos años. Es una de esas actrices que marcó a los espectadores de una época gracias a su belleza pero que con el tiempo demostró no ser sólo una cara bonita.
La bella Ornella Mutti
Su presencia delante de las cámaras cinematográficas se remonta al año 1970, cuando apareció en La esposa más hermosa de Damiano Damiani, donde coincidió con quien sería su primer marido, Alessio Orano. A pesar de ser italiana, su belleza llamó la atención en el extranjero y es precisamente en España donde Ornella Muti, de nuevo junto Alessio Orano, protagonizó la película que la lanzó a la fama, Experiencia prematrimonial, dirigida por Pedro Masó en 1972. En ella se narraba las peripecias de una pareja que decide convivir antes de casarse, algo que ahora sí es muy normal pero no en la sociedad española de comienzos de los 70. Fue un auténtico éxito y Ornella Muti se puso en el punto de mira de muchos directores.

Escena de Experiencia prematrimonial
A pesar de estas circunstancias, la actriz volvió a trabajar en España en Una chica y un señor (1974), de nuevo dirigida por Pedro Masó y Cebo para una adolescente (Francisco Lara Polop, 1974). Incluso participó en Leonor (1975) a las órdenes del hijo de Luis Buñuel, Juan Luis, y con compañeros en el reparto de la talla de Michel Piccoli y Liv Ullmann.

Los años finales de la década de los 70 y el comienzo de los 80 fueron bastante fructíferos para Muti ya que trabajó en proyectos destacados. El primero de ellos tiene especial relevancia para un servidor, se trataba del filme !Que viva Italia! (1977). Se trata de una recopilación de historias breves, lo que se denomina una película de episodios, dirigidos por tres maestros del cine italiano: Mario Monicelli, Dino Risi y Ettore Scola. También destacaban los grandes actores que aparecían como Vittorio Gassman, Alberto Sordi y Ugo Tognazzi. Pues bien, Ornella Muti interviene en uno de los mejores episodios del conjunto, titulado Sin Palabras. No me resisto y quiero que lo vean por la belleza de Ornella y la historia en sí que a mí me dejó como el título del mismo. También destaca por incluir dos bellas canciones: Ti amo de Umberto Tozzi y All by myself de Eric Carmen, teniendo esta última un papel inesperado en el desenlace de la historia.
Otras películas destacables de esta época en la trayectoria de Muti fueron: Muerte de un corrupto (Georges Lautner, 1977), junto a Alain Delon, Días de amor y venganza (Sergio Corbucci,1980), con Marcello Mastroianni o La chica del atardecer (Dino Risi, 1982), con Ugo Tognazzi. Incluso tuvo incursiones en el cine americano como lo demostró su papel de la princesa Aura en Flash Gordon (Mike Hodges, 1980). La presencia de Muti en películas de habla inglesa se extiende a comedias como "
Oscar, quita las manos (John Landis, 1991) al lado de Sylvester Stallone o Sólo falta el asesino (Eugene Levy, 1992).
La actriz en Flash Gordon (1980)
En la carrera de Muti destacan también sus intervenciones en varias adaptaciones literarias de calidad y resultado variables: Crónica de una muerte anunciada (Francesco Rosi, 1987), sobre la novela corta de Gabriel García Márquez, donde Muti compartía cartel con Anthony Delon, Rupert Everett, Lucia Bosé e Irene Papas, El amante bilingüe (Vicente Aranda, 1993), erótica historia sobre la novela de Juan Marsé y donde actuaba al lado de Imanol Arias y Javier Bardem, con quien tiene una curiosa escena con un zapato.

También destaca su intervención en una ambiciosa adaptación televisiva de la novela de Alejandro Dumas El Conde de Montecristo (Joseé Dayan, 1998) con Gerard Depardeau, Jean Rochefort e Inés Sastre.
Con Depardieu en El Conde de Montecristo
En los últimos años se le ha podido ver en la comedia española Di que sí  (Juan Calvo, 2004) con Paz Vega, Santi Millán y Santiago Segura o, entre otras, en la producción histórica En busca de la tumba de Cristo (Giulio Base, 2006) junto a Max Von Sydow, Danielle Liotti, F.Murray Abraham y Mónica Cruz.

El paso de los años no ha hecho otra cosa que confirmar que, al igual que otros bellezones como Sofia Loren o Claudia Cardinale, con Ornella Muti se cumple el dicho de "Quien tuvo, retuvo" y, en su caso, bastante, de esa jovencita que encandiló a toda una generación hace ya más de cuarenta años. Así que, Tanti Auguri Ornella

jueves, 3 de marzo de 2011

La novela negra se escribe en femenino

Los últimos libros que he leído (cuatro para ser exactos) han tenido en común el género, novela negra o de suspense y que todos estaban escritos por mujeres. Esto me ha hecho evidenciar que la herencia de la gran Agatha Christie no ha caído en saco roto. Todavía recuerdo un anuncio en televisión de una colección de novelas de esta autora consistente en una imagen de ella en una película casera y si no recuerdo mal decía "esta dulce ancianita cometió multitud de crímenes con sus propias manos" en referencia, lógicamente, a su oficio de escritora. Ya en uno de mis primeros artículos , Una trama que engancha después de más de 70 años hacía referencia a una de sus mejores novelas, "Diez negritos",  y a la fuerza y vigencia de su obra y el estilo que tenía para atrapar la atención del lector.
Agatha Christie (1890-1976)
Como ya hablé de ella en su momento ahora pretendo hacer una recopilación de sus "herederas" actuales. En primer lugar me gustaría destacar la figura de Donna Leon. La considero la más "europea" de las escritoras americanas y con "Muerte en la Fenice" (1992), que desde aquí recomiendo, inauguró una serie de novelas protagonizadas por un comisario, Guido Brunetti, y ambientadas en la bella ciudad de Venecia. Tiene un estilo bastante atractivo y sabe llevar a buen puerto la trama y los personajes, aunque a veces se le va la mano con las escenas domésticas del comisario.
Donna Leon
Una de las características más destacables de la novela negra es el hecho de que  sus tramas pueden desarrollarse en cualquier lugar o época como demostró Umberto Eco en su obra maestra "El nombre de la rosa". De igual manera, la escritora Alys Clare tomó la época medieval, en concreto el comienzo del reinado de Ricardo Corazón de León, para narrar los casos de una peculiar pareja de detectives, el caballero Josse d'Acquin y la abadesa Helewise en una serie de novelas, subtitulada en España como "Los misterios de la abadía" y que fue inaugurada en 1999 con "La novicia asesinada". He de reconocer que tendré que leer las siguientes novelas de la serie para ver si termina de convencerme pero hay que admitir que estas novelas tienen en su ambientación una de las claves de su éxito.

Otra autora británica destacable en este ámbito es P.D. James, una de las más veteranas autoras de novela negra de la actualidad, nacida en Oxford en 1920, con una carrera literaria que comenzó en los 60 y cuyo éxito ha llegado a la actualidad con títulos como "Muerte en el seminario" o "Muerte en la clínica privada" aparecida en 2008.
P. D. James
 Otro foco importante de escritoras dedicadas a la novela negra en la actualidad es Suecia y el resto de países nórdicos. A raíz del éxito de la trilogía "Millennium" de Stieg Larsson, se han dado a conocer escritoras de esta zona de Europa, donde sobresalen por méritos propios dos nombres: Asa Larsson, la autora de "Aurora Boreal", una prometedora primera novela, "Sangre derramada" y "La senda oscura", todas ellas con la abogada Rebecca Martinsson de protagonista.
Asa Larsson
Por su parte, Camilla Lackberg inició su ciclo de novelas con la exitosa "La princesa de hielo" donde la pareja formada por Erika y Patrik se encargan de resolver sórdidos crímenes, en un ciclo que incluye títulos como "Los gritos del pasado" o "Las hijas del frío".

Para terminar el repaso escandinavo he de mencionar una autora para mí desconocida pero que prometo comprobar su calidad: Mari Jungstedt, quien se ha revelado con títulos como "Nadie lo ha visto" o "Nadie lo ha oído".

A diferencia de la anteriormente citada Donna Leon existen en América autoras que desarrollan sus historias en su tierra natal con notable repercusión entre la crítica y el público, como Patricia Cornwell que ha destacado con sus novelas protagonizadas por la forense Scarpetta, como "Post Mortem" o "El factor Scarpetta".

Seguramente, me he dejado muchas autoras en el tintero pero creo que la selección es bastante variada para que los posibles lectores tengan dónde escoger para pasar un buen rato de intriga gracias a las páginas de un libro, donde las imágenes que transmiten las palabras a veces son más poderosas que las imágenes que vemos en el cine.