jueves, 22 de marzo de 2012

Blanca Portillo: "Dürrenmatt es un autor fundamental y en estos momentos, más todavía"

Blanca Portillo es una actriz con un enorme talento. Formada en la Real Escuela Superior de Arte Dramático (RESAD) sus interpretaciones en teatro, cine y televisión han sido siempre valoradas y reconocidas por crítica y público, con varios premios MAX y de interpretación en festivales como San Sebastián o Cannes. Con una amplia trayectoria teatral, está hasta el domingo en Sevilla con La Avería de Friedrich Dürrenmatt (escritor suizo, autor de obras como La visita de la vieja dama o Los Físicos) donde dirige, interpreta y produce.La Avería y un repaso a algunos hitos de su carrera son la base de esta entrevista, concedida a este blog.  
Un servidor, con Blanca Portillo        Alejandro Reche Selas

Pregunta: ¿Cree que Friedrich Dürrenmatt es un autor algo desconocido y a rescatar?

Blanca Portillo: Sin duda. Dürrenmatt no ha desaparecido de las carteleras del mundo desde que comenzó a escribir. Sí es posible que no sea uno de los autores  teatrales más conocidos, al menos en España ni más de uso habitual. Pero creo que es un autor fundamental y en estos momentos más todavía. No olvidemos que él comienza a publicar en los años 50, justo después de la Segunda Guerra Mundial, en un momento de crisis importante. Es un analista social muy fuerte y creo que, ahora más que nunca, su punto de vista es necesario.

P: Un aspecto destacado de esta obra es que los actores (con la excepción de José Luis García-Pérez) interpretan a ancianos ¿cómo ha sido el trabajo de caracterización para conseguir ese resultado?

B.P.: A mí nunca me ha gustado ver en el escenario gente maquillada para parecer viejos: una cana, una corrección pintada de marrón, arrugas...Eso no me lo he creído. Los personajes de esta obra son ancianos muy mayores, oscilando todos entre los ochenta y cinco y los noventa y cinco años, que a lo largo del espectáculo rejuvenecen, van ganando energía y van haciendo cosas imposibles de hacer para un anciano. Yo pensé que lo fundamental era que el espectador viera a un anciano. No  podíamos poner a ancianos de verdad, porque no podrían hacer la función que tenían que hacer, pero sí creí necesario que el espectador viese a ancianos reales. Entonces recurrí al cine, a quienes hacen la caracterización, no el maquillaje, para un plano corto, de forma que el espectador desde la primera fila no tuviera la menor duda de que es un anciano aunque se sepa que es un actor y que tiene un nombre. Lo que se ha usado es una máscara de látex que se adhiere completamente a la cara y responde a los gestos de su rostro. Se pone entera: cabeza, orejas...todo. Es un hallazgo, la verdad.

P: Usted tiene una amplísima trayectoria teatral ¿qué tiene de especial el teatro?

B.P.: Es apasionante. No tiene nada que ver con otras cosas. Consiste en entrar todos de la mano a una misa pagana durante meses. Y subirse al escenario, a ese altar sagrado a oficiar y a escuchar la respiración de la gente.

P: Hace unas semanas vino la Compañía Nacional de Teatro Clásico con El perro del hortelano. En su trayectoria, el personaje de Dorotea en la película de Pilar Miró de 1996 ¿le trae muchos recuerdos?

R: Creo que El perro del hortelano es otra de esas obras que me han perseguido. La hice en la Escuela donde sí pude hacer a la Condesa, luego la he visto varias veces. Pero si yo recuerdo El perro del hortelano es por haber tenido la oportunidad de conocer a Pilar Miró, básicamente. Además, hizo una película espléndida. Nunca en España se ha hecho un texto clásico con tanta belleza, perfección y grandeza. La lástima es que no fuera la primera de muchas películas que podrían hacerse con textos del barroco español, como hacen los franceses con Molière. Lo que ella hizo debería haberlo seguido haciendo mucha más gente. Para mí es una película impresionante, al igual que lo que hacen  Emma Suárez, que ahí la conocí, y Carmelo Gómez.

P: Usted forma parte del reparto de Volver (Pedro Almodóvar, 2006), que fue premiado en conjunto en el Festival de Cannes ¿qué fue para usted ese premio colectivo?

R: Eso es la bomba (risas), maravilloso. Me pareció lo más bonito que podían hacer. Además lo dijeron: "Premiamos a la familia de mujeres creada por Almodóvar". Porque creó una familia de verdad. Ir a ese festival, que es lo que es, una  experiencia, y subirte allí y que te den ese premio...Para mí es toda una satisfacción y un orgullo haber participado en una película como ésa.

P: En la televisión, con la serie Siete Vidas, tuvo un incremento masivo de popularidad ¿cómo recuerda esa época?

R: Para mí fue un cambio muy radical. Me alegro de que eso ya me pillara con una cierta edad y también es verdad que tengo una buena toma de tierra, algo que me pega mucho al suelo, porque es muy fuerte el cambio: pasar de observar a ser observada, pasar de escuchar a ser escuchada y a que todo lo que haces se vea.

P: Su personaje de Rosa Ballester en la serie Acusados es de culto ¿es un personaje que le ha marcado?

R: Lo adoro, yo hubiera interpretado a Rosa Ballester todo el tiempo que hubiera hecho falta. Creo que hubiera tardado mucho tiempo en aburrirme de ella. Era un personaje muy interesante de hacer. Tenía dos facetas muy claras: su vida personal y su vida profesional. Dura pero profundamente vulnerable. Valiente y con mucho miedo a la vez. Llena de ternura pero incapaz de sacarla, en fin era una mujer muy interesante de hacer.

No hay comentarios:

Publicar un comentario