Marta Vera: "Entre los maquilladores no hay competencia"

La caracterización es una parte esencial en terrenos como el cine, la moda y la publicidad. Conseguir el efecto deseado, para transmitir un mensaje o para que un personaje esté acorde con la historia en la que está involucrado es responsabilidad del equipo de maquillaje y peluquería, demostrando que todas las partes deben ir en consonancia para que el resultado en conjunto sea el deseado, y de este tema Marta Vera sabe mucho.

Marta Vera junto a la actriz Iazúa Larios

Marta Vera es una experta en este trabajo, se desenvuelve con una auténtica profesionalidad entre prótesis, cremas, pinturas y otros elementos con los que lo mismo puede hacer creíble una cicatriz que conseguir que un actor o modelo tenga el tono justo y preciso para estar delante de una cámara. Su labor reciente, que también abarca el departamento de vestuario, la ha llevado a formar parte de proyectos como el filme La soledad del triunfo  o  la TV Movie Ciudadano Villanueva, con Pablo Vega, Iazúa Larios, actriz de Apocalypto, de Mel Gibson, y Juan Pablo Shuk (Gamboa en la serie El Barco).

Marta Vera, durante el rodaje de Ciudadano Villanueva

De su trayectoria y sus impresiones del mundo del maquillaje nos habló en una entrevista concedida para este blog. 

Pregunta: ¿Desde cuándo empieza a interesarse por el mundo del maquillaje?

Marta Vera: Fue bastante curioso. Yo, con tres años, me comí una barra de labios, ya que veía a mi madre pintarse los labios y yo quería repetir lo que veía y al intentar pintármelos me comí la barra.

P: En su proceso de formación destaca la master class con el pintor y escultor Julio Quijano ¿qué le pueden aportar estos artistas a los maquilladores?

M.V.: Todo, aunque trabajen en plano, ya que trabajar sobre una cara no es lo mismo que en un lienzo, ya que la cara entraña una serie de complicaciones que no las tiene un lienzo. La piel está viva, transpira, brilla y el maquillaje se ajusta, se adapta, se evapora, se pierde o no. La  experiencia con Julio Quijano ha sido una de las más bonitas de mi vida, por una concentración plena en cómo cogía el pincel, cómo trazaba. Es que en lo nuestro no hay competencia, aunque la gente piense lo contrario, porque un maquillador puede ser de estilo picassiano, muy perfeccionista y otro puede ser muy impresionista, que le guste trabajar a trazos más grandes. Nadie puede maquillar como nadie, porque cuando se entra en el terreno de la creatividad, eso es algo muy personal y no te lo puede quitar nadie, es tu sello.

P: Uno de sus últimos trabajos ha sido en la película La soledad del triunfo, de Alvaro de Armiñán, ambientada en el mundo del toreo ¿qué destacaría de este proyecto y de su director, hijo de Jaime de Armiñán?

M.V.: Podría destacar muchísimas cosas, desde el equipo humano que hemos tenido, estupendo, con el que hemos hecho un camino de 21 días muy intenso y la verdad es que mis compañeros me han hecho muy fácil el camino, ya que hemos tenido localizaciones y experiencias diferentes, trabajando con animales incluso. Hemos hecho cicatrices y un pequeño efecto de sangre en una bañera, aparte de maquillar a los actores. Con respecto a Alvaro de Armiñán, he de decir que lo adoro, es un profesional como la copa de un pino y sólo puedo hablar maravillas de él.

P: En sus inicios se encuentran experiencias en cortometrajes  como Los que vigilan y musicales, concretamente Chicago...

M.V.: El musical fue una muy buena experiencia ya que fue montado por una escuela y en el vestuario hicimos de todo: plumas, corsés, flecos...Fue un trabajo muy bonito, y el cortometraje Los que vigilan fue dirigido por Federico Casado Reina y se presentó en el Festival de Cine Europeo de Sevilla, protagonizado por Sebastián Haro, con quien he vuelto a coincidir en "La soledad del triunfo", y Mariano Peña.

P: En el terreno de la publicidad, llama la atención su trabajo para la firma de joyas "Dublos", ya que en la campaña que se hizo las personas que en ella aparecen dan la sensación de estar desnudas ¿cómo se plantea la labor de maquillaje en una campaña de estas características?

M.V.: En ese caso lo que se pretendía era recrear una escultura sobre un mito griego, el de la ninfa Dafne que se transforma en laurel para huir del dios Apolo. Con respecto al trabajo, si la persona tiene un tono uniforme de piel lo que se hace es dar  un producto para darle un matiz bonito a la piel de cara a las fotos.

P: Su labor se ha extendido al terreno de los videojuegos con un anuncio para la PlayStation (para el juego Infamous 2)...

M.V.: En principio no iba a ser un trabajo con mucha complicación, pero luego se dieron cuenta de que el chico escogido tenía que ser igual que el del videojuego y cuando lo hicieron yo lo caractericé y le hice la cicatriz que tiene el personaje. Ahí entra la labor de documentación que nosotros debemos hacer viendo fotos o imágenes para saber cómo encarar el trabajo y el material que vamos a usar.

P: Cuando ve una película o un reportaje fotográfico ¿suele fijarse en los detalles de si la labor de maquillaje está bien realizada?

M.V.: No me suelo llevar el trabajo a casa, porque entonces te vuelves loco y entonces no disfrutas de la película, por ejemplo. Lo que sí estoy es pendiente y si veo algún fallo muy obvio sí me doy cuenta. En Una mente maravillosa cuando el protagonista (Russell Crowe) está caracterizado de mayor, las manos no están caracterizadas, estaban "jóvenes".Estas cosas suelen pasar, ya que el factor tiempo cuenta mucho a la hora de rodar.

P: Como maquilladora española ¿se siente orgullosa por el Oscar al maquillaje de El laberinto del fauno (Guillermo del Toro, 2006)?

M.V.: Totalmente, es un trabajo perfecto, sobre todo de creatividad, ya que el proceso para poder desarrollar un personaje de esa manera, con esa tipología de cara es asombroso. El proceso creativo es muy difícil, desarrollar unas facciones, una coherencia con el personaje, un trabajo de documentación para saber cómo es un fauno, cómo se componía, buscar al figurante adecuado etc...

P: ¿Cómo definiría en la actualidad el trabajo de los profesionales de su sector?

M.V.: Ahora mismo hay, como yo, freelance. Somos pocas las que trabajamos así porque, en general, no te lo puedes permitir. Hay veces que tienes mucho trabajo y otras en las que hay poco , entonces buscar trabajo se convierte en otro trabajo.