jueves, 30 de junio de 2011

Un emocionante canto de amor a la ciudad de Sevilla

Ayer tuvo lugar en la Fundación Cruzcampo la presentación del libro La sombra de la Giralda (Editorial Jirones de Azul), de Rafael Peralta Revuelta. El libro combina hábil y elegantemente la prosa y la poesía para hablar de la ciudad que vio nacer al autor: Sevilla. Al acto no faltaron su familia, con un emocionado y orgulloso padre, Rafael Peralta, y otras personalidades como el maestro de los ruedos Curro Romero. La presentación corrió a cargo del propio autor, que estuvo acompañado por el presidente de la Fundación Cruzcampo, Julio Cuesta, y Esperanza y Rosa García Perea, directoras de la Editorial Jirones de Azul.

 Peralta Revuelta, Rosa y Esperanza Gª Perea y Julio Cuesta
La primera intervención fue de Julio Cuesta, quien dio la bienvenida al público  asistente a la presentación, para dar paso a Rosa García Perea. García Perea agradeció a la Fundación Cruzcampo "por su apoyo desde el principio". También destacó que ha sido un libro que ellos han dilatado en el tiempo para su creación pero que Rafael había sido muy "generoso con ellas" evocando su primera reunión en una cafetería de la calle Trajano y le dio un recado de Antonio Burgos, "un abrazo" de su parte.

Rosa Gª Perea dio de nuevo la palabra a Julio Cuesta, quien ensalzó magníficamente las cualidades del libro de Rafael Peralta Revuelta. Cuesta consideró en primer lugar que la presentación de La sombra de la Giralda era "el mejor acto para clausurar el ciclo de presentaciones de libros que se ha hecho en la fundación". Cuesta calificó  al libro como "una obra primorosamente editada gracias a una serie de elementos: Jirones de Azul, el prologuista del libro, Curro Ruiz Torrent, quien expresa e ilustra las sensaciones , los colores etc... de manera muy bonita".

Cuesta desglosó fragmentos del prólogo y del propio libro, destacando pasajes como el de la Giralda, donde es descrita "como alguien que te está permanentemente mirando". Cuesta destacó la parte del libro dedicada a la primavera y luego el hecho de que el autor "vincula esa sensibilidad de Sevilla con las personas, como en los artículos dedicados a Doña María de las Mercedes y Cayetana de Alba. Cuesta también destacó los temas costumbristas que el autor trata en el libro: barrios, hermandades, el gazpacho o incluso a la cerveza Cruzcampo.

Después de la intervención de Cuesta, le llegó el turno a Rafael Peralta Revuelta, quien, en primer lugar, agradeció, entre otros, a la editorial y a la Fundación Cruzcampo. Hizo también mención al valor del prólogo del libro y, por encima de todo, deleitó al público asistente con la lectura de algunos de sus poemas, donde se tratan temas de los más diversos, como las naranjas de Sevilla, con las que se hace la mermelada que toma la reina de Inglaterra, una hermosa comparación entre las Plazas de España de Sevilla y Roma, un emocionante poema a la memoria del futbolista Antonio Puerta, un simpático poema dedicado al gazpacho, y unas pequeñas composiciones, primero a Curro Romero, presente en el acto y luego a la Hermandad de la Pura y Limpia a la que el autor ha querido donar los derechos de autor junto a la Asociación contra el Cáncer.
Rafael Peralta, su hijo, Curro Romero y Julio Cuesta
En definitiva, un libro, para sentir, oler y degustar el ambiente incomparable de una ciudad como Sevilla que, gracias al saber hacer de Rafael Peralta Revuelta, se nos transmite con gran efectividad, gracias a las palabras que el lector se encuentra en su libro La sombra de la Giralda.

FOTOS: ALEJANDRO RECHE

jueves, 23 de junio de 2011

Presentación del libro "Sevilla en negro"

Ante todo, pido disculpas por no haber podido escribir antes pero la tecnología me jugó una mala pasada. Es por eso que hoy, ya de madrugada, informo sobre la presentación del libro Sevilla en negro. Crónica negra de los primeros años del siglo XX en Sevilla (Guadalturia Ediciones)  que tuvo lugar el martes en el Círculo Mercantil e Industrial de la capital hispalense. Al acto acudieron Juan Luis Contreras, autor de la novela y al que entrevisté el pasado jueves (pueden ver la mencionada entrevista en la entrada del blog titulada La-parte-oscura-de-una-ciudad-luminosa ).
 Contreras, Demetrio Cabello y Jose Mª Toro



Junto a Contreras se encontraban Demetrio Cabello, Comisario Principal del CNP y José Mª Toro, editor de la novela. Toro fue el primero en intervenir, agradeciendo la acogida del Circulo Mercantil para la presentación del libro y leyendo unas palabras del periodista y escritor, Nicolás Salas, cuya presencia se esperaba pero una indisposición física le impidió asistir al acto.

Salas dejó escritas unas palabras, que Toro se encargó de leer donde destacó que "es un libro que enriquece la bibliografía sevillana y lo hace cubriendo un hueco histórico en la temática negra, la de sucesos. Tiene una prosa cuidada y fácil de asimilar que dejan al lector satisfecho, tanto en su curiosidad y morbo como en el afán de conocer mejor apartados desconocidos de la historia de Sevilla".

Además Salas, señala que "de los diez relatos" (de los que consta el libro) "es difícil valorar una jerarquía, porque todos sin excepción son eslabones básicos de la historia negra de Sevilla". Finalmente, Salas destacó, con respecto a Juan Luis Contreras "su vocación de historiador de lo oculto. Ha tenido la lealtad y la habilidad de recuperar hechos de hace un siglo pero sin  hacer abstracción de las circunstancias de la acción y el lugar".

Por su parte, Toro resaltó que el libro "tiene la oportunidad de reflejarnos la sociedad de la época, una sociedad deprimida, con bastantes problemas, por lo que se convierte en una crónica muy interesante de los primeros 20 años del siglo XX en Sevilla".

Seguidamente, tomó la palabra Demetrio Cabello quien destacó "que muchas de las historias del libro son fruto de esa situación de hambre y miseria que se vivía en aquella época". También resaltó el reflejo del sistema judicial de aquella época gracias a los recuerdos del inspector Igea, hilo conductor del libro, y, por otro lado, mencionó el método de investigación describiéndolo como "de calle, de pie, de investigación, preguntando, buscando testigos". Cabello admitió que es una novela que "engancha" y , finalmente, comparó los sistemas de ayer y de hoy para resolver casos, tanto en la obtención de pruebas como en la forma de esclarecer los casos.

El último turno fue para el autor del libro, Juan Luis Contreras. Comenzó  agradeciendo las palabras de los anteriores y siguió disertando sobre los orígenes del libro, cuya gestación comienza tras prejubilarse, y cómo su investigación, con la intención de dar a conocer casos no tan conocidos ,como sí lo son el de las estanqueras o el de Los Galindo, en la Hemeroteca Municipal, le hizo descubrir una gran cantidad de casos interesantes.

Contreras afirmó que en la época en la  que ubica las historias reflejadas en el libro, "la seguridad ciudadana era más que preocupante". Además, en Sevilla "la mayoría de los hombres portaban una navaja, con una situación desoladora". Seguidamente destacó la aparición del inspector Igea, un hombre que consiguió resolver muchos casos y que los diez casos incluyen los de "un descuartizador, un duelo en una finca de Torreblanca con el Marqués de Pickman, el descubrimiento de unos huesos en la cuesta del Rosario, el caso de un habilidoso estafador, los crímenes de El huerto del Francés, el asesinato de una chiquilla en una ermita...". Contreras afirmó que la labor de investigación fue "muy laboriosa y gratificante al mismo tiempo".

sábado, 18 de junio de 2011

Sorprendentes cambios de registro

En una profesión, como es la de actor, se tiende al denominado encasillamiento. En general, suele ocurrir que los intérpretes asociados a las comedias, o películas con temáticas amables, suelen sorprender gratamente a un gran sector del público porque no se los esperaban actuando de manera genial en papeles dramáticos. Por eso voy a enumerar una serie de ejemplos de intérpretes españoles para que el lector se haga una idea de lo que pretendo mostrar. Para empezar me centraré en dos actrices de enorme popularidad que tuvieron el denominador común de ser referentes en el cine popular de los años sesenta.

En primer lugar, la tristemente desaparecida Rocío Dúrcal, era muy querida y admirada con sus películas llenas de canciones como su debut en el cine Canción de Juventud (Luis Lucia, 1962) o Más bonita que ninguna (Luis César Amadori, 1965). Pero en 1972 sorprendió a muchos con su interpretación en Marianela dirigida por el recientemente fallecido Angelino Fons. Se trataba de una nueva adaptación de una novela de Benito Pérez Galdós, la primera la había protagonizado Mari Carrillo en 1940 a las órdenes de Benito Perojo. En la película, Rocío Dúrcal, aparecía afeada, ya que interpretaba la dramática historia de una muchacha desfigurada enamorada de un ciego. Con este papel, Dúrcal demostró que no sólo sabía cantar y hacer reír.
Rocío Dúrcal en Marianela
Otra actriz muy popular en la misma época que Rocío Dúrcal, Pepa Flores, más conocida como Marisol, quiso dejar atrás su imagen de niña y adolescente cantante forjada con títulos como  Un rayo de luz (1960) o Tómbola (1962), ambas dirigidas por Luis Lucia, en otro tipo de producciones. Sus dotes dramáticas,ya en su etapa adulta, fueron bien aprovechadas por directores como Mario Camus que la dirigió en Los días del pasado (1978) o Rafael Moreno Alba, quien la escogió para protagonizar la serie de televisión Proceso a Mariana Pineda (1984) sobre la figura que popularizó Federico García Lorca en su famosa obra teatral.
Pepa Flores, en Proceso a Mariana Pineda



Precisamente Mario Camus, al que hemos mencionado anteriormente es un especialista en sacar un gran potencial dramático a los actores que con él trabajan. Un gran ejemplo es el papel de "La Poncia" que interpretó magníficamente Florinda Chico, conocida sobre todo por sus papeles cómicos, en La casa de Bernarda Alba (1987) que ya mencioné en otro artículo recientemente. Pero es que la interpretación de Chico es soberbia como la del resto del reparto con una Irene Gutiérrez Caba como la mejor Bernarda Alba que yo, hasta el momento, he podido ver.
Florinda Chico en medio de una escena de La casa de Bernarda Alba


De nuevo Camus, pero tres años antes, consiguió que Alfredo Landa, actor cómico por excelencia, fuese premiado junto a Paco Rabal en el Festival de Cannes gracias a la magnífica interpretación de ambos en Los santos inocentes (1984) ejemplar adaptación de la novela de Miguel Delibes. Sin embargo, hay que señalar que Landa ya había dado muestras de su potencial interpretativo, comedias aparte, en películas tan diferentes como El crack (José Luis Garci, 1981) o La próxima estación (Antonio Mercero, 1982) donde tiene unas escenas geniales con Lola Herrera y veíamos a una jovencísima Cristina Marcos. Luego Landa ha dado muestras de su calidad en la serie El Quijote (Manuel Gutiérrez Aragón, 1992) o Historia de un beso (José Luis Garci, 2002).
Landa con Terele Pávez en Los santos inocentes
Otra gran actriz que, en un principio estaba vinculada a la comedia era Concha Velasco, gracias a sus películas junto a Tony Leblanc o Manolo Escobar pero, aunque ya había mostrado su lado dramático en televisión con su interpretación de Doña Inés en Don Juan Tenorio junto a Paco Rabal para Estudio 1 , en el cine su gran cambio de registro se vio en dos películas dirigidas por Pedro Olea: Tormento (1974) adaptación de otra novela de Benito Pérez Galdós, junto, de nuevo, a Paco Rabal y una joven Ana Belén, y Pim pam pum fuego (1975).

Luego, el potencial dramático de Concha Velasco se vería reafirmado a un nivel mucho más popular gracias a su soberbia interpretación en Teresa de Jesús (1984), serie dirigida por Josefina Molina sobre la célebre santa nacida en Avila. Velasco no ha dejado de sorprender desde entonces por su versatilidad en cine con, por ejemplo Más allá del jardín (Pedro Olea, 1996), televisión, con Motivos Personales (2005) o Herederos (2007-2009) o el teatro, ya que con la obra La vida por delante dirigida por José Mª Pou, que tuve ocasión de ver, hizo llorar de emoción a más de uno.
Concha Velasco en la dramática obra de teatro La vida por delante
Precisamente Concha Velasco trabajaría en "Herederos" con una actriz, Concha Goyanes, que sorprendió gratamente al hacer de "mala" cuando generalmente siempre ha tenido papeles amables, desde que comenzó de niña al lado de entre otros, Rocío Dúrcal o Joselito, pero en la mencionada serie dio muestras de una maldad y de una capacidad interpretativa increíbles.

Otro gran ejemplo de cambio de registro es el que dio el entrañable José Luis López Vázquez, en diversas etapas de su dilatada carrera donde dio cuenta de sus excelentes dotes para la comedia, pero yo destacaría el que mostró a comienzos de los años 70 en tres trabajos, tras sus papeles dramáticos con Carlos Saura: Las películas El bosque del lobo (Pedro Olea,1970) y, sobre todo,Mi querida señorita (Jaime de Armiñán,1972), nominada al Oscar y donde López Vázquez hace un arriesgado papel de mujer que se da cuenta de que es un hombre. Por último, López Vazquez volvió a estar en el punto mira internacional gracias a su trabajo en La Cabina (Antonio Mercero, 1972) producto televisivo,con un final que te deja con la boca abierta, y que fue premiado nada menos que con un Emmy.
López Vázquez en la angustiosa La Cabina

Finalizaré este recorrido con dos actrices muy populares en la actualidad y vinculadas a la comedia. Carmen Machi, es admirada como actriz cómica por sus papeles en las series Siete Vidas y Aída pero yo, personalmente he podido comprobar sus dotes dramáticas en la obra de teatro Roberto Zucco, historia sobre un asesino en serie que interpretaba Iván Hermes, dirigidos por Lluis Pasqual.

Por último la gran Gemma Cuervo, madre de Fernando y Cayetana Guillén Cuervo, se ha hecho muy popular estos años gracias a sus intervenciones en series como Médico de familia, Aquí no hay quien viva o La que se avecina, actualmente en emisión. En todas estas series predomina la comedia pero se sorprenderían de su registro dramático si viesen sus interpretaciones en los míticos Estudio 1 de TVE, como Las brujas de Salem o El mercader de Venecia. Si quieren ver este registro de Gemma Cuervo, no se pierdan su actuación en teatro de La Celestina. Yo aun no la he visto, pero debe de ser espectacular.
Gemma Cuervo en Las brujas de Salem de Estudio1
Este tipo de artículos tienen el defecto de dejar a mucha gente sin mencionar pero creo que esta selección es bastante significativa para que se valore la versatilidad de nuestros intérpretes.

jueves, 9 de junio de 2011

La parte oscura de una ciudad luminosa

En una ciudad, hechos de diversa índole suponen una alteración en el transcurso de la vida diaria. De todos los tipos de acontecimientos que existen son los sucesos los que suscitan un mayor revuelo en la población. Precisamente, el relato de un conjunto de sucesos, es la base del libro Sevilla en negro. Crónica negra de los primeros años del siglo XX en Sevilla (Guadalturia Ediciones), escrito por Juan Luis Contreras (Sevilla, 1944), un hombre que trabajó en el Banco Bilbao de Sevilla de 1960 al año 2000. Del origen de este libro, los pormenores de algunos de los casos incluidos en él y de otros temas nos habla este sevillano enamorado de su ciudad y de su historia
Juan Luis Contreras, en la antigua Audiencia 
Provincial, con su libro "Sevilla en negro"
Pregunta: ¿Qué le llevó a escribir y, en concreto,"Sevilla en negro"?

Respuesta: Yo me prejubilé y decidí que tenía que hacer algo. En mi caso yo decido escribir porque quiero transmitir algo de Sevilla. Yo soy un enamorado de Sevilla y quería dar a conocer algo para que lo supiera la gente. ¿Por qué Sevilla en negro? Es un libro sobre la crónica negra de la ciudad. Cuando yo era joven me entusiasmaba la lectura de George Simenon, Agatha Christie, Earl Stanley Gardner, Ian Fleming,  Sir Arthur Conan Doyle y otros muchos más.

Yo quería contar algo de la crónica negra de Sevilla pero que no fuera reciente, sino algo desconocido y, a través de un amigo, que estaba en la Hemeroteca Municipal, empiezo a bucear y cuál es mi sorpresa que me encuentro con una serie de casos ocurridos en Sevilla a principios del siglo XX impresionantes y diarios y pensé "aquí tengo un filón." Había incluso el denominado "El Crimen del día".

Además hay un personaje, un inspector de policía,  Ignacio Igea, el personaje central del libro, que consigue resolver muchos casos y persigue con mucha vehemencia y profesionalidad a los delincuentes. Llego a recopilar hasta sesenta casos, de 1901 a 1917. Son crímenes importantes. De esos sesenta casos hago una criba y me quedo con veintitrés. Y, finalmente, se quedaron en diez.

P: ¿Cuál ha sido el criterio de selección para escoger los diez casos del libro?   

R: Lo principal era que hubiera una variedad, que no sólo fueran crímenes, también hay, por ejemplo, estafas.

P: Los casos son reales pero están "novelados" ¿Se ha hecho para que fueran más cercanos al lector?

R: Yo no quería convertir el libro en un ensayo, en plan crónica de pasó esto, pasó esto... Al lector le gusta que se le novele un poco. Yo tengo que imaginarme cómo se ha llevado a cabo la investigación. No es novela histórica sino una historia un poco novelada. Tiene intriga, algo de humor, de drama etc...

P: Para la elaboración del libro ¿a qué fuentes ha tenido acceso para documentarse?

R: Sobre todo prensa de la época como El Porvenir, El Liberal y El Noticiero Sevillano.

P: Pero curiosamente, en el libro hay fotos reales de algunos de los casos narrados, y son del ABC...

R: Sí, porque en los periódicos que he mencionado era raro ver una fotografía y ABC tenía un buen reportero gráfico que hacía muchas fotografías. En ABC me he basado poco para la documentación porque el ABC de Sevilla no se funda hasta 1929, y algunos casos los mencionaba ABC de Madrid, como el de "El Huerto del Francés", por eso hay foto y en el caso del Marqués de Pickman no era de ABC sino de Blanco y Negro.

P: Algo que llama la atención es la portada del libro ¿qué quiere simbolizar?

R: Es una portada interesante: La lupa se identifica con el investigador, como Sherlock Holmes, hay una mancha de sangre y el humo del puro o el habano del policía. El humo representa el momento en el que el caso no lo ve claro. Luego la lupa resalta la Puerta del Perdón de la Catedral de Sevilla, el perdón hacia esos delincuentes.

P: Los casos son variopintos y algunos tienen finales controvertidos  como el de El crimen de la Ermita ¿en algunos casos quiere dejar la duda al lector de si el declarado culpable lo es realmente?

R: Yo mismo tengo dudas, ya que, a veces se dictamina cadena perpetua en vez de pena de muerte. Sin embargo, en el caso de El Huerto de el Francés la culpabilidad está clara y entonces se aplica la pena de muerte. También los casos de estafas están claros.

P: Uno de los pasajes más impactantes del libro es aquél en el que describe las horas previas a la ejecución de unos condenados por asesinato ¿en qué se basa para esa descripción tan minuciosa?

R: El 80% procede de la prensa, había un periodista destacado que iba comentando todo lo que ocurría allí en esas horas previas.

P: Un referente televisivo sobre crímenes reales es La Huella del Crimen ¿está usted de acuerdo con la frase que introduce la sintonía: "La historia de un país es también la historia de sus crímenes, de aquellos crímenes que dejaron huella"?

R: Sí, porque la historia de un país es una suma, de guerra, conflictos, personajes, artistas, los crímenes forman de la historia, en este caso, de la ciudad.

P: ¿Qué opinión le merece la aproximación del cine y la televisión en España a estos crímenes reales como, precisamente El huerto del francés?

R: Me parece muy interesante. A mí es que el tema me apasiona y no puedo decir otra cosa. Además yo creo que a la gente le sigue gustando. Antes, El Caso, era una de las publicaciones más vendidas y la televisión sigue ese filón como Los misterios de Laura. El cine hay que tener en cuenta que se cambian  y añaden cosas, pero por ejemplo, El crimen de Cuenca, que lo tengo estudiado, es impresionante.

P: ¿Piensa retomar en otro libro algunos de los casos que descartó en su momento para elaborar "Sevilla en negro"?
R: Sí, pero más adelante. Primero haré otro a nivel nacional donde incluiré El caso del señor Ferrero, que ocurrió en Madrid, el caso del asesino de las quinielas, el Expreso de Andalucía, el crimen del capitán Sánchez, el de Mi hija Hildegart, que hizo Amparo Soler Leal en el cine. De momento los tengo ya documentados. El que no incluiré será el crimen de los Galindo,porque es un caso que todo el mundo conoce ya, se ha derramado ya mucha tinta. Otro libro del que tengo ya escrito algo es a nivel mundial sobre estafadores, y atracos como el de un hombre que estafó a Al Capone.

P: Pero su próximo libro va sobre la Sevilla de los Montpensier....

R: Sí se trata de La Sevilla de los Montpensier. Anales históricos de Sevilla. 1850-1875. No será novelado. Narrará acontecimientos y casos de la ciudad. Los protagonistas de fondo son los Montpensier pero no como personajes de ficción. Descubrí que de 1850 a 1900 no hay nada escrito y quería rellenar esa laguna. Son anales especiales, ya que cuando menciono un monumento o un torero, hablo de ellos. Hablo de los toros, la Semana Santa y teatros como el San Fernando o el Cervantes. Si hablo de un personaje  hago historia de ese personaje, por ejemplo, cuando la emperatriz Sissi visitó la ciudad, hablo de ella.

sábado, 4 de junio de 2011

Grandes actores veteranos "aman en tiempos revueltos"

El título de este post es un homenaje a una serie de actores con una característica común. Tienen una extensa carrera a sus espaldas y han formado parte de manera fija o esporádica de la serie estrella de las sobremesas: Amar en tiempos revueltos. La serie, que se emite desde 2005, y está apunto de llegar a los 1.400 capítulos, ha sido un gran escaparate para dar a conocer rostros jóvenes del panorama interpretativo del país como Marina San José, Sara Casasnovas o Marco Martínez. Pero, personalmente, a mí lo que me gusta es ver a actores de toda la vida, que aportan el contraste con los jóvenes. Empezando la enumeración de los ejemplos de lo que quiero mostrar en este post, comenzaré con el siguiente ejemplo: la nueva institutriz de Almudena (Roser Tapias), llamada Amalia, está interpretada por Enriqueta Carballeira.

Esta actriz tiene una extensísima carrera a sus espaldas que, en cine y televisión, se remonta a comienzos de los años 60 donde destacan títulos como La tía Tula (1964) y Oscuros sueños de agosto (1967), ambos filmes dirigidos por Miguel Picazo, o No somos ni Romeo ni Julieta (Alfonso Paso, 1969). También ha sido una gran asidua de los espacios dramáticos de Televisión Española como Novela o Estudio 1. Sin embargo, el papel que, para mí, es uno de los mejores de su carrera es el de Angustias, la mayor de las hermanas, en La casa de Bernarda Alba (Mario Camus, 1987), una gran adaptación de la inmortal obra de Federico García Lorca, donde Carballeira estaba acompañada por otras grandes actrices como Irene Gutiérrez Caba, Ana Belén o Vicky Peña (también interviene Florinda Chico pero me detendré en su interpretación en otro post sobre otro tema). 
Enriqueta Carballeira, la severa "Amalia",
en La casa de Bernarda Alba (1987)
Carballeira también ha participado en otras series de televisión como Hospital Central o El Comisario.

Otro actor que es un gran veterano es Juan Antonio Quintana, que interpreta a Basilio, el abuelo de la familia Muñoz. Quintana se hizo popular gracias a su intervención en Ana y los siete (2002), y ha intervenido en otras series de televisión pero yo lo recuerdo especialmente sobre las tablas en La Gaviota de Chejov junto a Roberto Enríquez, Carme Elías y Silvia Abascal, entre otros, en el año 2002.
Juan Antonio Quintana, "Basilio"
Otra gran actuación fue la que hizo Fiorella Fatoyano, en el papel de la embaucadora y estafadora Bibiana. Esta actriz saltó a la fama gracias a sus tempranas apariciones en televisión y despuntó en películas como Asignatura pendiente (José Luis Garci, 1977) o La Colmena (Mario Camus, 1982) y en series como La Regenta (Fernando Méndez Leite, 1995).
Fiorella Faltoyano, "Bibiana"
Siguiendo nuestro recorrido, hagamos un repaso ahora desde el principio de la serie: Los padres de Antonio (Rodolfo Sancho) fueron interpretados por Pilar Bardem y Francisco Algora. Este último tuvo su momento de gloria al interpretar al "fraile", uno de los miembros de la banda de Curro Jiménez (1976), junto con otros papeles en Fortunata y Jacinta (Mario Camus, 1980), El Quijote (Manuel Gutiérrez Aragón, 1992) o la película El Abuelo (José Luis Garci, 1998).

Uno de los papeles principales, el cura Don Senén, en las dos siguientes temporadas ,recayó en el actor Joan Llaneras, quien ha intervenido en series históricas de TVE como La saga de los Rius (Pedro Amalio López, 1976) o Segunda Enseñanza (Pedro Masó, 1986), donde era uno de los profesores del instituto por el que desfilaron unos jóvenes Javier Bardem, Amparo Larrañaga, Gabino Diego, Beatriz Santana, Maribel Verdú o Aitana Sánchez Gijón.
Joan Llaneras, "Don Senén"
Un papel breve pero importante al final de la segunda temporada fue interpretado por el gran Emilio Gutiérrez Caba. El actor, que actualmente triunfa en Gran Reserva, interpretaba al padre de Alicia Peña (Sara Casasnovas), cuyo fallecimiento era el arranque de la  tercera temporada.

La cuarta temporada contó con dos intervenciones de lujo, una de ellas bastante curiosa: Concha Goyanes (de la que hablaré en otro post) interpretaba a una monja cuyo testimonio era clave para saber quién era realmente la madre de Ana Rivas (Marina San José), investigación que llevaba a cabo el inspector Héctor Perea. Curiosamente, las escenas en la serie las compartía con el actor Javier Collado, que interpretaba al mencionado inspector, su sobrino en la vida real, ya que él es hijo de la también actriz María José Goyanes.
Concha Goyanes

Otra aparición de lujo en esa temporada fue la de Asunción Balaguer,  viuda de Paco Rabal, interpretando a la madre del inspector Salmerón (Miguel Ortiz).Su aparición fue breve pero clave para entender el comportamiento de dicho inspector.

Por último, en la quinta temporada, una de las principales protagonistas, doña  Lourdes, madre del doctor Mauricio Salcedo (Nacho Fresneda) era interpretado por Maite Blasco, quien debutó nada menos que en 1959 con La vida alrededor, dirigida por Fernando Fernán Gómez. Trabajó también en muchos espacios dramáticos televisivos y , más adelante, intervino en películas como El perro del hortelano (Pilar Miró, 1996).
Maite Blasco, "Doña Lourdes"
No se me ha olvidado Simón Andreu, quien interpretó en la segunda temporada a Ildefonso y quien precisamente, protagonizó con Enriqueta Carballeira, El buen amor, de Francisco Regueiro en 1963, una de las primeras películas de ambos.  Espero que, a lo largo de más episodios esta veterana serie nos sorprenda con apariciones de veteranos de la interpretación como los mencionados.