El XIII Festival de Cine Europeo de Sevilla (SEFF) ha arrancado con la proyección de la primera película de la Sección Oficial a concurso. En esta ocasión se escogió la película franco belga Une vie. Dirigida por Stéphane Brizé, responsable de La ley del mercado, se trata de la adaptación de la primera novela escrita por Guy de Maupassant, el célebre autor de Bel Ami.
La película se centra en la vida de una mujer en pleno siglo XIX en el campo. Sus peripecias tienen el denominador común de la desgracia, desde un infeliz matrimonio con infidelidad del marido incluida, hasta la imperiosa necesidad de dinero por parte de su hijo cuando económicamente ella ha caído en desgracia. Jeanne, la protagonista mantiene durante prácticamente todo el filme una actitud apesadumbrada, incluso hay un momento en el que el suicidio de ella pasa por la mente de los espectadores. La puesta en escena también contribuye a ese tono melancólico que tiene la película con una puesta en escena austera, elipsis bruscas que resuelven de un plumazo algunos conflictos y una cercanía de la cámara a los actores un tanto asfixiante. De hecho cuando se abre el campo de visión se nota que el filme respira un poco más. El filme expone convenciones sociales de la época que son comprensibles y una situación en concreto que precisamente por las mencionadas convenciones, chocan a un servidor incluso viéndolo desde la óptica del siglo XXI.
El filme no es que sea malo en absoluto, porque la recreación de la época está conseguida al igual que ciertos momentos álgidos en referencia a la potencia dramática de algunas escenas pero, como repito en el siguiente vídeo, creo que, para inaugurar el Festival se podría haber optado por un filme algo más alegre. Jeanne está interpretada por Judith Chelma y le acompañan en el reparto Jean Pierre Darroussin y Yolande Moureau.
Pero si ha habido un protagonista hoy ha sido el actor francés Vincent Lindon, precisamente el protagonista de la citada película La ley del mercado, que le hizo ganar el Premio de Interpretación en el Festival de Cannes. El actor de filmes como La escuela de la carne (Benoit Jacquot, 1998) o Mi pequeño negocio (Pierre Jolivet, 1999) ha sido galardonado con el Giraldillo de Honor en el marco del Festival hispalense.
En la rueda de prensa ofrecida a los medios Lindon confirmó, con respecto al premio obtenido en Cannes que "para mi yo profesional no cambió nada, no tenía más talento ni antes ni después de recibir el premio pero para el mundo del cine sí cambió. Admito que me emocioné y me llenó de alegría pensando en la gente a la que quiero, ya que vivimos por esas personas".
El actor mostró su preferencia por el cine en comparación con la televisión aseverando que "la magia del cine consigue que se cuenten cuarenta años en dos horas y en las series se refleja un año en un año. No pretendo criticar porque no poseo la verdad absoluta. El actor hace publicidad para productos de lujo o pone la vez a dibujos animados. Todo eso tiene ventajas y desventajas. El actor que hace eso cuando vuelve al cine sorprende a los espectadores".
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| El actor Vincent Lindon el en SEFF 2016. Alejandro Reche Selas |
Lindon reconoció que La Crisis (Coline Serreau, 1992) "fue una película muy importante en mi carrera porque me situó en otro nivel dentro del cine francés pero no puedo decir cuál es la favorita de las que he hecho, aunque hay algunas que no me gustan".
El actor tuvo tiempo para hablar del último filme que ha rodado, Rodin, dirigido por Jacques Doillon donde da vida al afamado escultor, autor de El Beso entre otras muchas obras maestras. Lindon habló entre otros temas de cómo era considerada Camille Claudel, su pareja durante varios años y también artista afirmando que "fue un genio pero trabajó menos que él y fue su alumna. En Francia les encanta defender a las personas que no fueron reconocidas por su talento y cuando ya lo son
también les encanta machacarles. Rodin era un genio como artista pero no era maravilloso como hombre. No se le conoció hasta haber cumplido los cuarenta años y se esforzó por llegar a ser el mejor escultor del mundo".
El actor tuvo tiempo para hablar del último filme que ha rodado, Rodin, dirigido por Jacques Doillon donde da vida al afamado escultor, autor de El Beso entre otras muchas obras maestras. Lindon habló entre otros temas de cómo era considerada Camille Claudel, su pareja durante varios años y también artista afirmando que "fue un genio pero trabajó menos que él y fue su alumna. En Francia les encanta defender a las personas que no fueron reconocidas por su talento y cuando ya lo son
también les encanta machacarles. Rodin era un genio como artista pero no era maravilloso como hombre. No se le conoció hasta haber cumplido los cuarenta años y se esforzó por llegar a ser el mejor escultor del mundo".
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